Hugo Malmori, representante de los funcionarios, indicó que Stark se hizo cargo de reencauzar Copaco hace seis meses, al ser nombrado como interventor por el Gobierno de Santiago Peña, pero hasta ahora no logró avances significativos que permitan salvar la institución.
El funcionario resaltó que cada mes, a duras penas, se recaudan fondos para pagar los salarios de más de 2.000 empleados que tiene la estatal, que siempre cobran con retraso. Alegó que cada vez se hace más difícil recaudar para cumplir con los compromisos, debido a que muchos clientes suscritos cancelan el servicio de telefonía, por la pésima calidad.
Malmori expresó que Copaco precisa de una reestructuración urgente, con la inclusión de tecnología de punta, que le permita competir con las demás telefónicas y que la vuelva a convertir en una institución insignia del Gobierno, como lo fue antaño. “Salvar Copaco debe convertirse en una causa nacional”, significó el funcionario.