Entre otros datos, detalla que Paraguay alcanza una tasa de empleados informales de 34,16% (sobre el total de personas empleadas), cifra casi 10 puntos porcentuales superior al promedio de América Latina y el Caribe (24,11%).
En este indicador, nuestro país se ubica solo por debajo de México, Guatemala y El Salvador, conforme a las estadísticas. Asimismo, muestra que Paraguay es una de las pocas naciones con un aumento en la tasa de informales desde 2012, junto a México, Guatemala y Chile.
Según el reporte, el 46% de los hogares en América Latina carece de un miembro en el sector formal. En los países más pobres, la proporción supera el 60%, pero incluso en naciones de ingresos medios altos, como Paraguay y Perú, las dos terceras partes de los hogares son informales.
También, el documento hace un apartado sobre el cambio en el coeficiente de Gini para cada país en tres periodos. En casi todas partes las reducciones más grandes se dieron en la primera década del siglo XXI (2002-12). Después de 2012, la cifra disminuyó en algunos países, en otros se produjo un estancamiento y en otros la desigualdad aumentó, siendo este último el caso de Paraguay.
PROPUESTAS. El BID recomienda una serie de políticas públicas para reducir las brechas y salir de la pandemia con cimientos más sólidos.
De acuerdo con los análisis, una de las claves para corregir las inequidades es introducir mejores políticas fiscales, pero uno de los obstáculos centrales es precisamente la alta tasa de informalidad en las economías. Así, el reporte llama a los gobiernos y otros actores sociales a generar un nuevo contrato social. Además, considera necesario rediseñar los servicios sociales con el fin de hacerlos más inclusivos.
La cifra
34,16 por ciento de empleados en el país son informales, según el BID. La cifra está por encima del promedio regional (24,11%).