María Selva Morínigo, esposa del ex fiscal general del Estado Javier Díaz Verón, fue beneficiada ayer con el arresto domiciliario por el Tribunal de Apelación en lo Penal, Primera Sala.
Con ello, los camaristas Pedro Mayor Martínez, Gustavo Santander y Bibiana Benítez revocaron la resolución del 21 de agosto pasado del juez José Agustín Delmás, que decretó la prisión preventiva de la procesada en el Penal de Mujeres del Buen Pastor.
La resolución dice que concede el arresto domiciliario a la encausada, con el control aleatorio de la Policía Nacional, con la advertencia de que en caso de incumplimiento deberá volver al penal de mujeres.
La procesada por supuesto lavado de dinero será convocada para esta mañana para el cumplimiento de la medida dispuesta por los camaristas.
Sin embargo, según el defensor Mario Elizeche Baudo, la medida debía ser de cumplimiento inmediato, y luego podría ser convocada ante el Juzgado para la aceptación de las condiciones.
Según dicen los camaristas, en el presente caso resultan plenamente aplicables las medidas sustitutivas a la prisión, que pesan actualmente sobre Morínigo.
Remarca que conceden la medida teniendo en cuenta que se trata de un delito y no de un crimen, con lo que la pena máxima es de hasta cinco años de encierro.
Además, tuvieron en cuenta el allanamiento de la fiscala Carmen Gubetich de Cattoni, con respecto al arresto domiciliario.
La magistrada Bibiana Benítez, por su parte, apoyó el arresto, pero entendió que debía además aplicarse una caución real de G. 1.700 millones, pero este voto fue en minoría.
El Tribunal de Apelación dispuso también que el Juzgado librara los oficios pertinentes a la Policía Nacional y al Departamento de Migraciones.