“Recordarán ustedes la fuga que hubo en el penal (Minga Guazú) y las informaciones que a mí me proveyeron era que ni candado tenían, y además tienen que tener en cuenta que ahí está Tío Rico. Lastimosamente, la corrupción imperante en la penitenciaría no (se) ha minimizado”, dijo.
Rubén Maciel, viceministro de Política Criminal del Ministerio de Justicia, dijo también a la 1080 AM que la fuga en Minga Guazú, ocurrida en marzo de este año, fue de un total de ocho presidiarios, pero fue con la complicidad de funcionarios penitenciarios.
Explicó que la zona para recluir a mujeres con un alto riesgo es el módulo 8 de la Penitenciaría de Minga Guazú, que funciona en la planta alta del penal. Allí guardan reclusión Carmen Villalba y otras detenidas del grupo armado autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). “El penal de Minga Guazú fue pensado inicialmente para varones. Ante la necesidad de que también se pueda albergar a mujeres que tengan ese perfil que requiere de un régimen cerrado especial, se habilitó la planta alta para recluir a mujeres. Tenemos una cantidad de 11 o 13 mujeres”, explicó. Destacó la seguridad de dicha cárcel y la del otro penal de máxima seguridad que es Emboscada.
“Los tres establecimientos estaban expectantes y pendientes de recibir a esta persona, tanto en el sistema penitenciario de la Policía Nacional como en el de los militares”, subrayó.
La recientemente recluida en la cárcel militar de Viñas Cué Gianina García, esposa del prófugo uruguayo Sebastián Marset, cuenta con un régimen especial debido a su alto perfil. Tiene a su disposición un teléfono móvil que está monitoreado por las autoridades, y después de cada comunicación telefónica la mujer tiene que firmar en una planilla. La institución militar provee el teléfono sin costo para que pueda hablar con sus familiares y abogados. Hay un límite de 20 minutos para las llamadas. Los lunes, miércoles y viernes fueron elegidos como los días en los que se pueden establecer las comunicaciones. Mientras que los martes, jueves y sábados fueron elegidos para la visita presencial de los familiares y abogados. De lunes a domingos están contempladas actividades de esparcimiento y salida al patio, como parte de la rutina.
Jueza destacó el operativo secreto para realizar traslado
La jueza Penal de Garantías Rosarito Montanía justificó el sigiloso operativo de traslado de Gianina García Troche, esposa del narcotraficante uruguayo Sebastián Marset, al penal militar de Viñas Cué. Se utilizó una cláusula de confidencialidad para evitar filtraciones y otras medidas de seguridad.
El traslado a la cárcel de Viñas Cué de Gianina García Troche, esposa del supuesto narcotraficante uruguayo Sebastián Marset, se realizó de forma sorpresiva y sigilosa en la tarde del miércoles, incluso para los agentes que se encontraban en el sitio.
La jueza Rosarito Montanía tomó la decisión sobre el lugar de reclusión de la mujer, así como del traslado que en todo momento se mantuvo en secreto para evitar filtraciones.
La mujer llegó en la mañana del miércoles al Aeropuerto Silvio Pettirossi y era una incógnita su lugar de reclusión, así como el traslado. Se manejó la información de que sería llevada a la Fiscalía a declarar vía terrestre y que luego pasaría a la Agrupación Especializada.
Sin embargo, la jueza Montanía decidió cambiar a último momento la forma de traslado hasta el lugar de reclusión.
“La decisión del traslado en el helicóptero se hizo con una persona en particular y siempre bajo las condiciones de confidencialidad”, explicó a la Monumental 1080 AM.
criterios. La jueza detalló que Gianina García se quejó de las restricciones y el lugar de reclusión que dispuso para ella, y habló de los criterios que tuvo para tomar diversas decisiones en el marco de dicho caso.
“Sabemos que su pareja se encuentra prófuga y es buscada no solamente por nuestro país, sino también por Bolivia, inclusive ahora por los Estados Unidos. Entonces, evidentemente podemos decir que cuenta con la protección de gente muy importante; entonces se manejó de esa manera”, recalcó.
La declaración por parte de la Fiscalía se realizó en una de las dependencias de la terminal aérea, el Centro de Operaciones Especiales del Aeropuerto Silvio Pettirossi.
“Se decidió hacer en ese lugar, justamente, por motivos de seguridad, y se mantuvo en confidencialidad para minimizar los riesgos que pudieran acarrear en su momento procesal”, reveló la jueza.
La defensa de Gianina solicitó su remisión a la Agrupación Especializada o en la base de la Secretaría Nacional Antidorgas (Senad), pero fue rechazada el pedido.
“Ella no va a tener necesidad de salir del recinto para poder ser asistida por médicos; se cuenta con odontólogos, psicólogos, también cuentan con psiquiatras dentro del penal”, dijo la magistrada.