Para Santagada, no existen dudas de que el incendio fue provocado, lo que constituye un hecho sumamente grave para la democracia.
“Esto no es una fatalidad del destino. Alguien mandó a incendiar el depósito del TSE. Es gravísimo. Es un ataque directo al sistema electoral paraguayo”, expresó.
“¿A quiénes beneficia? Sí, a ellos; pero a menos que un hecho externo cambie las cosas, nadie los tocará”, se preguntó, sin hacer referencia a nadie en particular.
El feroz incendio en el edificio del Tribunal Superior de Justicia Electoral se inició durante la siesta del jueves pasado y rápidamente se propagó hacia el techo, desplomando parte de la estructura.
El funcionario identificado como José Aníbal Ortiz, coordinador del Departamento de Concepción, perdió la vida en el lugar.
La fiscala general del Estado, Sandra Quiñónez, conformó un equipo de agentes fiscales para investigar el hecho, el cual está integrado por los fiscales Giovanni Grisetti, María Luján Estigarribia, Estefanía González y Luz Guerrero.
El Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) realizó un inventario donde determinó que alrededor de 7.600 máquinas quedaron dañadas en el feroz incendio que se registró en sus instalaciones.
Autoridades del TSJE pidieron al Congreso Nacional hacer una única modificación en el artículo 218 del Código Electoral, relacionado con el cierre de votación de las internas del próximo 18 de diciembre.
La votación se extendería hasta las 20:00.
