29 may. 2025

“Es inviable construir otro cementerio de la Recoleta”

La situación de progresivo estado de deterioro de un alto porcentaje de plazas y parques de Asunción, con bancos y juegos infantiles rotos, escasa o nula iluminación, entre otras carencias, torna inviable la propuesta de trasladar el cementerio de la Recoleta para convertirlo en área verde, según la opinión del concejal Rafael Villarejo.

El edil sostuvo que existen espacios de esparcimiento en diferentes sectores de la ciudad, que reciben cada cinco o seis meses una atención superficial por parte del Municipio, citando como ejemplo el caso de las existentes en Zeballos Cué, lo que se da también en barrios alejados del microcentro.

La propuesta de mudanza de una gran parte del cementerio de la Recoleta fue presentada por el concejal Félix Argaña, a través de una minuta que también contempla la permanencia en el sitio de ciertos sectores de valor histórico y arquitectónico. La petición fue girada por la Junta Municipal a la Intendencia.

“Tenemos 400 hectáreas en el Jardín Botánico y Zoológico, que no se aprovechan y espacios verdes y parques por todos lados que no tienen inversión. No podés convertir la Recoleta en una plaza y gastar en eso US$ 2 millones, cuando el resto de esos sitios están destruidos y cuando hay frentistas y comisiones vecinales que están llorando para que se arreglen las que se tienen en sus barrios”, lamentó.

Villarejo se preguntó si las autoridades municipales no serían un tanto incoherentes al plantear este tipo de inversiones cuando la realidad muestra que los bienes municipales para recreación de la ciudadanía están sin equipamientos y con una infraestructura bastante dañada.

“Primero reparemos lo que tenemos, cumplamos con los vecinos de Asunción, que para eso pagan sus impuestos y tasas especiales, haciendo de sus plazas lugares habitables y decentes, para luego crear este tipo de cosas”, precisó.

ONEROSO. En otro momento, el concejal indicó que otro aspecto que conspira contra este proyecto es el alto costo que supone la mudanza del camposanto, ya que se debe eventualmente indemnizar a los propietarios por las mejoras introducidas en sus panteones y adquirir un nuevo terreno para llevar todos los féretros, y ese es un dinero que el Municipio no tiene.

En ese sentido sentenció que la Comuna capitalina apenas tiene un presupuesto de G. 10.000 millones por año para encarar obras en la ciudad, por lo que a su criterio, disponer de fondos para costear los gastos de ese traslado sería impensable.

Recordó que la minuta de Félix Argaña, quien hizo la propuesta de traslado de la Recoleta, fue aprobada sin ningún tipo de tratamiento para su derivación a la Intendencia, puntualizando que un debate hubiese sido saludable, puesto que habría incorporado todos esos matices a la discusión.