A nivel local, las implicancias dependerán del nivel de tolerancia que tengan los bancos ante el riesgo, ya que ninguno está obligado a dejar de operar con una persona que está en la lista de OFAC.
“A la luz de la normativa local, lo que resulta imperativo es el reporte en tiempo (24 horas) a la Seprelad en caso de hallar coincidencias entre un cliente y alguna persona listada por la OFAC. La norma local no establece como obligatorio (ni siquiera lo sugiere) dejar de operar con personas físicas o jurídicas que estén listadas por la OFAC, por ende, esa decisión queda librada a otros aspectos, uno interno y otro externo. El interno es la tolerancia al riesgo que tenga el banco, y el externo es qué tanta presión reciba de sus bancos corresponsales”, sostuvo el especialista
En cuanto al nivel internacional, la primera implicancia es que el sistema financiero y comercial norteamericano debe dejar de operar con las personas que figuran en la lista de OFAC, es decir, se impide que personas físicas y jurídicas norteamericanas realicen operaciones con quienes están sancionados, indica el abogado.
El mayor problema con esta sanción es que para comercializar fuera del país se debe utilizar el dólar, pese a la relevancia China, según indicó García, por tanto, las empresas de Cartes que fueron sancionadas podrían comenzar a tener problemas cuando realicen transferencias internacionales, que deben pasar por un banco norteamericano.
A las empresas del Grupo Cartes se les complica mucho más ya que la normativa norteamericana trasciende fronteras, y las operaciones internacionales deben ser compensadas por los llamados “bancos corresponsales” en EEUU, indica García.
La limitación no es solo abrir una cuenta en los bancos norteamericanos para las personas que están en la lista de OFAC. “Suelen extender sus exigencias a los bancos con los que ellos operan, en el sentido de requerirles que, si tienen cuentas abiertas a nombre de personas listadas, las cierren, bajo apercibimiento de que si no lo hicieran les cerrarán las cuentas de corresponsalía, las que son vitales para los bancos y por cuya conservación están dispuestos a perder clientes locales”, alertó.
Los bancos tienen aversión al riesgo, por lo que suelen ser conservadores y, cuando hay una persona listada, pueden extender las consecuencias.
Es posible que entes financieros aumenten las medidas de control sobre las personas políticamente expuestas.
Guillermo García,
experto lavado de activos.