Finalmente, tras una reunión de más de dos horas entre el presidente Santiago Peña, el vicepresidente Pedro Alliana, miembros del Gabinete y representantes de los cañicultores, se llegó a un principio de acuerdo para presentar en 30 días un proyecto para la construcción de una nueva planta de molienda de caña de azúcar.
El titular de Petropar añadió que el proyecto del “mal llamado nuevo tren de molienda”, heredado del gobierno anterior fue considerado inviable debido a problemas de ejecución, formalización de plazos y falta de consideración del impacto ambiental. Adelantó que el caso será enviado al Ministerio Público.
Jara sostuvo que desde el Gobierno se busca responder a las necesidades de los cañicultores mediante la construcción de una nueva planta.
Jara mencionó que se necesita procesar entre 300 y 600 toneladas y que actualmente solo se llega a 402 toneladas de caña de azúcar.
Asamblea extraordinaria. Cristian Fonseca, presidente del gremio de cañicultores de Troche, dijo que como microproductor necesitan el apoyo del Gobierno, estabilidad laboral, lo que significa un nuevo tren de molienda, acorde a la capacidad productiva. “Un sueño que llevamos años queriendo que se nos culmine”, lamentó.
Fonseca mencionó que tras la reunión realizarán un asamblea extraordinaria para llevar a consenso la propuesta presentada por el Ejecutivo y, posteriormente, anunciar qué medidas tomarán. “Nosotros no agarramos ningún documento porque para aceptar un documento tenemos que hablar con los cañicultores”, aclaró.
El ministro de Agricultura y Ganadería, Carlos Giménez, se mostró optimista en que antes del inicio de la zafra, previsto para fines de junio, ya se cuente con un proyecto de la nueva planta de molienda de caña de azúcar.
Petropar entregó como anticipo de la obra suspendida G. 41.778 millones de los casi G. 200.000 millones que iba a costar la fallida planta.