El asesor del presidente estadounidense, Joe Biden, y el canciller chino tuvieron una conversación “sincera y constructiva”, explicó la Casa Blanca en un comunicado.
El encuentro tuvo lugar tras las visitas a Pekín de este verano boreal del secretario de EEUU, Antony Blinken; de la secretaria del Tesoro, Janet Yellen; del enviado especial para el Clima, John Kerry; y de la secretaria de Comercio, Gina Raimondo.
El objetivo oficial de estos viajes es fijar “líneas de comunicación estables” entre Washington y Pekín tras meses de tensiones por las disputas comerciales, la situación de Taiwán y la guerra de Ucrania.
Sullivan y Wang Yi ya se vieron el pasado mayo en Viena en un primer signo de acercamiento después de que EEUU derribara un supuesto globo espía chino que sobrevolaba su territorio a principios de año.
Según la Casa Blanca, esta vez en Malta, Sullivan recalcó ante Wang “la importancia de mantener la estabilidad en el Estrecho de Taiwán”, y ambos se comprometieron a que sigan los “encuentros de alto nivel” entre ambos países durante los próximos meses.
A su vez, Wang remarcó que Taiwán es la “primera línea roja” que Washington no debe traspasar en la relación bilateral, e instó a EEUU a no apoyar la independencia de la isla, informó la agencia estatal china Xinhua.
Maratónico. Una alta funcionaria del gobierno estadounidense que pidió reserva de su nombre indicó que en total las reuniones habían durado 12 horas en los dos días, y recordó que la precedente cita bilateral de este nivel había tenido lugar en mayo.
Por la misma época, el presidente estadounidense había pronosticado un “deshielo” en las relaciones entre ambos países, que se habían deteriorado tras el señalado vuelo de un globo chino.
Durante su intercambio con el ministro chino, Sullivan “enfatizó que EEUU y China compiten, pero que EEUU no busca conflicto o confrontación”, añadió la alta funcionaria durante un intercambio con la prensa. “Wang Yi subrayó que la cuestión de Taiwán era la primera línea roja que no debía cruzarse en las relaciones chino-estadounidenses”, aseguró por su parte Pekín.
El asesor de la Casa Blanca reiteró, según la alta funcionaria, que Estados Unidos no “apoya” la independencia de la isla –que China reclama como parte de su territorio– pero que rechaza un “cambio unilateral en el statu quo” tanto por parte de los taiwaneses como de los chinos.
En Malta, ambos países “se comprometieron a mantener consultas” en ciertos ámbitos, en particular en relación a “la evolución de la política y de la seguridad en Asia-Pacífico”, según la fuente de la Casa Blanca.
Sin embargo, las comunicaciones militares de ambos países, que Pekín cortó en agosto de 2022 tras una visita a Taiwán de la presidenta de la Cámara de Representantes estadounidense, Nancy Pelosi, no se han reanudado.