EEUU condena a un padre por la muerte de su hijo, a quien obligó a correr en una cinta

Se trata de Christopher Gregor (32), sentenciado a 25 años de cárcel por los terribles abusos físicos a los que sometía a Corey Micciolo, de 6 años. El juez de la Corte Superior del condado de Ocean, Giu Ryan, lo condenó a 20 años por homicidio agravado y a cinco más por poner en peligro a un menor, publicó CourtTV.

En el juicio que afrontó el hombre, se confirmó que le decía al niño que estaba “demasiado gordo”.

Inicialmente, fue acusado de asesinato. Pero el jurado lo encontró culpable de un delito menor. La familia de la víctima pidió 40 años de prisión.

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El momento en que el hombre obligó a correr en una cinta a su hijo quedó grabado en la cámara de circuito cerrado de un gimnasio. Esto ocurrió el 20 de marzo de 2021. Semanas después, el 2 de abril del mismo año, llevó urgente a su hijo a un hospital por síntomas alarmantes y pocas horas después el niño murió.

Las grabaciones mostraban cuando Corey tropezaba y caía varias veces, mientras intentaba mantener la corrida. Incluso el padre agarró al niño por la remera y parecía que lo mordió en la cabeza una vez, según los fiscales.

El día que el pequeño despertó grave de la siesta, empezó a tropezar, arrastrar las palabras, tener náuseas y falta de aire. Los médicos le realizaron una tomografía computarizada, donde comenzó a tener convulsiones, y pese a que se tomaron medidas en ese momento, ya no se le pudo salvar la vida.

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Una autopsia indicó que el niño presentaba lesiones por objeto contundente con contusiones cardíacas y hepáticas e inflamación aguda y sepsis. No obstante, la causa de su muerte fue indeterminada hasta entonces.

Recién cuando un patólogo forense revisó el caso se determinó que fue un homicidio. La hipótesis fue que Corey Micciolo sufrió una lesión traumática aguda en el corazón entre 4 y 12 horas antes de su muerte, que llevó a la teoría de un abuso crónico, incluidas lesiones por impacto contundente en el pecho y el abdomen, como así también laceración del corazón, contusión pulmonar y en el hígado.

La madre, Breanna Micciolo, y los abuelos del niño habían solicitado la pena máxima para el acusado.