“Estoy feliz por todo el trato que tengo de parte de la gente que me quiere. No quiero apurar las cosas, quiero hacer las cosas a mi medida sin forzar nada”, explicó Nancy Giménez, cuando estaba en pleno festejo por el día del maestro, en la escuela España, de San Lorenzo.
Indicó que se encuentra bien y que está tratando de volver a la normalidad, pero lamentó que su novio, el policía Rafael Ramos, sigue sin recuparse del todo por los golpes que recibió. Reconoció, además, que el efectivo se encuentra decaído anímicamente.
La profesora recordó que todavía no fueron llamados a declarar por la fiscalía.
La pareja también recibirá una atención sicológica de parte del ministerio Público una vez que ellos estén en condiciones de iniciar las sesiones.
Giménez, su novio, el empresario japonés Hirkazu Ota y su secretaria Sawako Takayama, fueron privados de su libertad por 20 días, en un secuestro que finalmente concluyó con el pago del rescate y la liberación de los mismos.
El objetivo de los secuestradores era el japonés Ota, miembro de la secta Moon y presidente de la empresa Victoria S.A. El policía, que estaba con su novia, observó el hecho e intentó ayudar a la víctima, pero no pudo. Los delincuentes decidieron llevar además de los japoneses al efectivo policial y a su novia.