En un ambiente emotivo, con música y palabras de afecto y agradecimiento, tuvo lugar ayer el último adiós a Juan Bautista Castillo Benza, más conocido como Nizugan, en el cementerio Parque Futuro, de Luque.
Camino a su última morada, la caravana recibió expresiones de cariño y admiración con saludos y pasacalles, así como en el predio del Sportivo Luqueño (del que fue jugador), a donde fue llevado antes del responso en la iglesia de Luque.
En el templo principal de la ciudad, el arpista Miguel Angel Ramírez ejecutó numerosas piezas, entre otras Bergel Luqueño y una canción alusiva a la magia.
Ya en el cementerio, los amigos, familiares y colegas que acompañaron los restos del mago, le regalaron el último aplauso y palabras de afecto y admiración.
“Soy vecina de los Castillo y comparto este gran dolor con los familiares. Juan Bautista también fue mi padre y amigo; un hombre que trabajó por la cultura de Luque. Hoy le digo adiós a Toto, a quien siempre recordaré como un amigo y una excelente persona; un papá con mayúsculas”, dijo Miriam Elisa González de Burgos, declamadora y bailarina de danza española.
González también recordó que el muñeco Panta (Pantaleón), uno de los primeros de Nizugan, fue una creación de Regina Gaona de Valiente (Margarita de la Sierra), a quien conocía. “Nizugan fue una persona inigualable, quiso a su Luque en todo sentido, él era de Luque, para y por Luque”, destacó.
Agradecimiento. “Quiero agradecer el acompañamiento, el cariño a mi papá. Ese cariño seguirá vivo en las fotos de los cumpleaños que alegró, en la ternura de los niños que acompañó, en su alegría”, dijo emocionada Susana Castillo, hija del artista. “En nombre de toda la comuna luqueña, de los niños, a quienes tanto alegró Juan Bautista con su magia, sonrisa y su ‘hijo’ Cachito, me permito decir gracias a este artista; un Grande con mayúsculas”, afirmó, por su parte, María Cristina Pérez, del área cultural de la Municipalidad.
Por su parte, Zully Domínguez, bailarina y actriz, integrante del jurado del Tacuare’é (hija de Mercedes Jané, teatrista y docente, una de las formadoras de Nizugan), dijo a ÚH que su presencia en el sepelio obedecía a su deseo de representar a todos los actores, y se quejó por la ausencia de representantes de organizaciones artísticas y referentes del Gobierno en la despedida del creador del célebre Cachito.