AFP–EFE
QUITO /GUAYAQUIL
Más de 22.400 militares desplegados, patrullajes por tierra, aire y mar, requisas en las calles, operaciones en cárceles, toques de queda: el gobierno del nuevo presidente, Daniel Noboa, no cede ante los ataques del narco en una “guerra” que tiene a la población sumida en el miedo.
“Quisieron infundir temor, pero despertaron nuestra ira. Creyeron que someterían a todo un país y se olvidaron que las fuerzas armadas están entrenadas para la guerra”, advirtió el ministro de Defensa, Gian Carlo Loffredo, en un mensaje en redes sociales.
Aunque la actividad se reanudó levemente en las principales ciudades, muchos comercios se mantienen cerrados, el transporte público circula con menor frecuencia de la habitual, universidades y escuelas atienden clases de manera virtual y prima el teletrabajo.
“Ceder ante el mal, ¡jamás!, luchar incansablemente, ¡siempre!”, dijo en alocución Daniel Noboa, presidente de Ecuador, de 36 años y en el poder desde noviembre.
El martes pasado, la ofensiva del narco mostró su peor cara con un ataque a la prensa registrado en vivo y en directo que dio la vuelta al mundo.
El Gobierno explica la reciente ofensiva como una represalia de las organizaciones ilegales, integradas por unos 20.000 miembros, en rechazo a sus políticas de mano firme para enderezar el rumbo de un país que hasta hace poco era tranquilo.
En los últimos cinco años, la tasa de homicidios por cada 100.000 habitantes pasó de 6 a 46 en 2023. “Si se meten con la población, se meten con las Fuerzas Armadas”, insistió el ministro de Defensa.
NUEVAS PRISIONES. El presidente Noboa presentó ayer los diseños de las dos nuevas cárceles que se construirán en el país y que ha señalado serán como las de máxima seguridad de El Salvador y México.
Desde el palacio presidencial de Carondelet, sede del Ejecutivo, en el centro histórico de Quito, Noboa presentó los diseños aprobados para la construcción de las nuevas prisiones, que se edificarán en las provincias de Pastaza (Amazonía) y Santa Elena (costa).
La presentación se realizó en un acto sin acceso a prensa y difundido mediante un mensaje en vídeo donde Noboa estuvo flanqueado por la ministra de Gobierno y de Interior, Mónica Palencia, y el ministro de Defensa Nacional, Gian Carlo Loffredo.
El anuncio se dio en medio del “conflicto armado interno” declarado el martes por el mandatario para combatir a las bandas del crimen organizado, que han protagonizado una escalada de violencia en las calles y cárceles de Ecuador, con motines en al menos siete prisiones donde permanecen retenidos 178 funcionarios penitenciarios.
Este plan supone aislar a los líderes de las bandas criminales mientras se construyen estas dos cárceles en Pastaza y Santa Elena, pero el pasado domingo se registró la fuga de José Adolfo Macías ‘Fito’, líder de la banda ‘Los Choneros’, antes de que fuese trasladado a una cárcel de máxima seguridad.
“Es el inicio de un urgente saneamiento del sistema penitenciario ecuatoriano que ha estado durante décadas controlado por las mafias”, aseguró el mandatario.
Volvió el noticiero
“El noticiero está de vuelta”, dijo al borde del llanto la periodista. El canal público TC reanudó su transmisión ayer luego de un ataque con fusiles y granadas que el mundo vio en directo, en una de las peores arremetidas del narco en el país. El telediario “está de vuelta aquí en el mismo espacio donde quisieron silenciarnos”, continuó la presentadora Saskia Bermeo desde Guayaquil, durante la primera emisión tras el ataque del martes. Ese día delincuentes irrumpieron durante el programa del mediodía, hirieron a dos trabajadores, mientras los televidentes escuchaban en vivo y en directo.