En este caso, María Antonella Galli está procesada como presunta responsable de la falsificación de la firma de Acosta, en una operación de importación de mercaderías ante Aduanas.
Tras varias recusaciones, la causa quedó finalmente en manos del fiscal Ángel Ramírez, quien fue recusado por Galli el 23 de setiembre de este año.
En este último recurso, la empresaria y su abogado Guillermo Duarte Cacavelos hicieron un análisis de los documentos.
“Las firmas estampadas en el escrito de recusación no corresponden al puño y letra de Galli, pues, de una simple revisión visual difieren en su morfología en general de la firma conocida como auténtica”, dice la denuncia.
La sospecha es que el abogado Ricardo Sasian (esposo de Galli) habría producido la firma de la procesada.
A raíz de eso, la denuncia también es por presunta frustración a la persecución penal, ya que con esto se está impidiendo el avance de la causa. En la denuncia, la empresaria solicitó el circuito cerrado de la Fiscalía General, a fin de ver quién presentó la recusación.