Con su iniciativa de sacar definitivamente de carrera a sus rivales eternos dentro del PLRA, Alegre se apoya en la creciente decepción hacia los llanistas de los 573 convencionales con que cuenta la nucleación política.
Es que dichos asambleístas van acercando sus pedidos de sanciones a legisladores que no siguen la línea partidaria y que marcan más cercanía con el Partido Colorado.
Uno de los pedidos fue hecho por los convencionales del exterior, que si bien no constituyen una mayoría importante, sirven de ejemplo para levantar la voz en contra de los integrantes del sector que lidera el titular del Congreso, Blas Llano. En general, les reclaman a los llanistas por operar para el Partido Colorado y no acompañar las líneas bajadas por la conducción liberal y apoyada por la oposición en general, como son los impuestos a la soja y al tabaco, entre otros.
La gota que colmó el vaso y que motivó la expulsión –primero– de cuatro senadores fue la elección de César Diesel como nuevo ministro de la Corte Suprema de Justicia.
Más que una intención personal de Alegre de chocar contra pesos pesados a nivel nacional como definitivamente son el senador Blas Llano y sus colegas de bancada, su decisión de apartar del Directorio a parlamentarios y otros dirigentes se funda en una fuerte presión interna.
También entra a tallar en esta puja de poder que el 2021 trae consigo, por un lado, las elecciones municipales y, por el otro, la elección para cargos partidarios.
ESCENARIO. Los excluidos del Directorio por decisión de Alegre y que con el apoyo de la convención podrían ser expulsados del partido son los senadores Fernando Silva Facetti, Juan Bartolomé Ramírez, Blas Lanzoni y José Ledesma. También están los diputados Édgar Ortiz y Hugo Capurro. La nómina sigue con los ex senadores Blanca Fonseca y Ramón Gómez Verlangieri; el parlasuriano Milcidades Duré; el ex diputado Pedro González; Alberto Aquino y Carlos María López.
Los votos para la convención están divididos en todo el territorio. La mayoría absoluta en una convención es de 287 votos, pero eso solo en el caso de que exista presencia unánime. La última convención que se recuerda es la del 2017, cuando el efrainismo ganó la pulseada contra el propósito de enmienda cartollanista. De aquel escenario al actual hay mucha diferencia.
Hoy el llanismo adhirió fuertes aliados, entre ellos líderes nacionales que comulgan con su línea, como es el caso de Juan Bartolomé Ramírez, José Ledesma y el mismo ex senador Dionisio Amarilla, sin contar con que Central es territorio llanista.
En Central se definirá la pelea dado que cuenta con 150 convencionales. El efrainismo sabe que este departamento es un bastión casi inexpugnable, aunque la balanza se fue equilibrando a partir de que cuentan con acuerdos con distintos equipos que van a salir a la cancha en 2021 cuando se renueven las autoridades municipales. Luque y San Lorenzo, que llevan juntos una buena cantidad de convencionales, tienen voto dividido. En Ñemby se encuentra el comité más grande del país y la hegemonía es de Lanzoni. Un jugador diferente para esta nueva pugna será el vicepresidente del PLRA, Líder Amarilla, que antes era llanista y ahora los enfrenta.
Para la iniciativa de la expulsión, Efraín seguramente contará con votos de Capital, donde el equipo del ex senador Luis Wagner, capitaneado en Asunción por el concejal Augusto Wagner, puede brindar votos, al igual que la única diputada capitalina liberal, Celeste Amarilla.