La salida de los granos en barcazas por el río Paraná desde distintos puertos de embarque que se hallan en el Departamento de Itapúa siempre fue una forma de exportación muy utilizada debido a los costos favorables. También el medio de transporte de referencia es fundamental para las importaciones.
La bajante del caudal hídrico es por culpa de la sequía en la cuenca de nacimiento del río pero también en diferentes regiones por donde cruza el emblemático Paraná. El fenómeno natural produce un fuerte impacto adverso a numerosos sectores afectados como las empresas exportadoras.
Unas 64 fueron las últimas barcazas que pudieron llegar hasta puertos sobre el río de la Plata cruzando la esclusa de navegación de la represa de Yacyretá, en mayo. Después ya no salieron las barcazas desde los puertos itapuenses porque las condiciones de navegabilidad del río Paraná ya no daban.
en camiones. La cooperativa Colonias Unidas y otras empresas que operan en el rubro ahora están enviando desde el departamento de Itapúa sus cargamentos de granos mediante el transporte terrestre a Asunción para embarcar por el río Paraguay, que aún permite la navegabilidad de las barcazas. La estrategia suma 10 dólares de costo por toneladas para las empresas, generando un enorme impacto económico. Ocurre que las firmas que ya acopiaron los granos de los agricultores a un determinado precio, no tienen de otra que asumir el costo de traslado a Asunción, pero en la cosecha de maíz que está llegando, el trigo y otros granos de exportación, los costos serán trasladados a los productores. El hecho genera preocupación en el sector productivo porque las previsiones meteorológicas no apuntan una solución de la bajante del río a un plazo inmediato, más en abril del 2022 podría aumentar el caudal del río, por lo tanto las exportación de granos, será una dificultad. En diciembre sí podría haber una leve mejoría en la navegabilidad del río, pero es incierto el panorama.
”No va ver navegación durante los próximos meses porque no hay probabilidades de lluvias importantes en la cuenca de nacimiento del río Paraná, en Brasil”, dijo Wilson Sedy, directivo de la Cámara de Terminales Portuarias, Caterpa.
El mismo analizó la situación. “El río Paraguay tiene hoy 1.400 metros cúbicos por segundo y se navega, pero el río Paraná con 5.300 metros cúbicos por segundo que tiene hoy no se puede navegar y es por la falta de dragado”, dijo. Agregó que desde el 2017 hasta el 2020 bajó 50% la cantidad de exportaciones por el Paraná debido a la sequía. ”En el 2017 el movimiento fue de 3,2 millones de toneladas por el Paraná que se redujo durante el 2020 a solo 1,5 millones de toneladas, lo que equivale al 50%”, señaló.
“En los puertos estamos prácticamente con la capacidad ocupada al 100%, son 600 mil toneladas que tenemos hoy en los puertos. En la retaguardia; es decir, en silos de acopio, cooperativas de productores, de empresas que se dedican al almacenaje de granos, hay más o menos un millón de toneladas también”, dijo. ”Cinco estados afectados en Brasil declararon emergencia por esta situación es por eso que estamos enviando vía terrestre cargamentos a Asunción para su salida por el río Paraguay”, dijo.