Por Andrés Colmán @andrescolman
Producción: Stefanie Céspedes @betistef Cámara y edición: Fabián Fleitas
“Nos vamos cuando terminen la corrupción y la impunidad en el Paraguay”, anuncia uno de los cientos de carteles pegados por las paredes del edificio central del Rectorado de la Universidad Nacional de Asunción, en el Campus de San Lorenzo.
“Si es así, no se van a ir nunca más a sus casas, porque en este país la corrupción y la impunidad están en todas partes, no se va a terminar nunca”, sonríe Gladys Ledesma, una mamá que acompaña a sus hijos en la vigilia que iniciaron en el lugar el pasado 21 de setiembre.
“No digas eso, mamá. Acordate que vos tampoco creías que íbamos a conseguir que (el rector) Froilán renuncie (a su cargo) y menos aún que se vaya preso. Y ya ves, ¡ahora está en (la cárcel de) Tacumbú!”, le responde su hija Francisca, estudiante de Economía, una de las miles de estudiantes que se movilizan activamente por el Campus, colaborando en los grupos de patrulla para evitar que se roben más documentos de las distintas facultades.
El ambiente es agitado y febril. Se nota una muy buena organización, con grupos que se encargan del control de los puntos de acceso al Campus y de la seguridad en todos los recintos.
Además, hay equipos encargados de cocina, dispensario, puesto de salud, informaciones, prensa, donaciones y logística, entre otros aspectos.
La creatividad se nota en la confección de los carteles, que están pegados por todas partes y se renuevan constantemente. Hay varios grupos de chicos y chicas dibujando y pintando, en una no explícita competencia por quién tiene más agudeza expresiva.
Frente al edificio del Rectorado, totalmente cubierto de banderas y carteles, está el escenario central, donde se realizan la peñas, los actos y las asambleas. Y cuando no hay una actividad, suena la música, principalmente el rock, que invita a bailar.
“No sabemos cuánto tiempo más durará esta situación de paro en las Facultades y en el Rectorado, pero los estudiantes seguiremos aquí, hasta obtener los principales cambios que buscamos, no solamente la renuncia de más autoridades acusadas de corrupción y su procesamiento en la Justicia, sino también la modificación de los estatutos de la UNA y otras medidas que nos permitan acceder a una universidad más democrática y de mejor calidad”, señala Arturo Cano, uno de los dirigentes de la revuelta estudiantil.
Mientras, el rock sigue sonando y los carteles de protesta y utopía se siguen pintando...