24 ago. 2025

Che retâme ajevývo

Una tarea todavía pendiente es el rescate de la producción artística de quienes por diversos exilios - el económico y el político- han dejado el Paraguay para acogerse a aires que, a fuerza de golpes del tiempo, han ido haciendo suyos, aunque nunca suyos del todo.

La historia del poeta bilingüe (guaraní-castellano) Teófilo Acosta Cantero es la de muchos que se han aquerenciado a medias bajo lejanas banderas y han expresado sus sentimientos a través de la poesía.

Nacido en Juan de Mena (departamento de Cordillera), el 4 de octubre de 1946, transitó el común itinerario de muchos de los que dejan su patria chica y hacen una escala previa para emprender vuelo hacia parajes más remotos.

Ya en el área de influencia de Asunción, su espíritu emprendedor pronto encontró cauces para trabajar y progresar económicamente. La dictadura stronista, sin embargo, le privó de la posibilidad de seguir viviendo cerca de los suyos. Al tomar el camino del destierro, eligió los Estados Unidos de América como destino.

Los paraguayos, cuando emigran - salvo contadas excepciones- , afirman que solo se marcharán por un tiempo. Es que en la partida tienen anclada la idea del regreso. Y cuando están ya en otros países, nunca están del todo en ellos, porque sus valijas a medio deshacer aguardan la hora en que el sueño se cumpla.

Lo de Teófilo no fue diferente. Pensó que pronto dejaría Washington para retornar a los húmedos entornos juandemeninos. No fue, sin embargo, así. A medida que caían los meses de las hojas del calendario, iba involucrándose cada vez más con el espacio adoptado que le permitía trabajar al frente de una empresa de construcciones, escribir poesía e ingresar al mundo de la comunicación radiofónica, siendo también fundador del Centro Cultural Paraguayo y director de la Regional Washington del Ateneo de Lengua y Cultura Guaraní.

“En 1995, invadido por el deseo de volver al Paraguay y añorando cuanto había quedado atrás para mí, escribí Che retâme ajevývo. Allí recuerdo lo que dejé, sobre todo aquel tiempo de vivencias en Juan de Mena. Y hablo también del Paraguay, de su danza y su música”, cuenta en una breve visita a Asunción.

Es evidente que la distancia avivó la vena creadora de Acosta Cantero. Su producción poética musicalizada es vasta. Los tres discos aparecidos con el nombre de Sueños y cantares - título también del poemario suyo que reúne parte de su poesía- dan fe de su producción.

Sus coautores en la parte de la composición son Dionisio (Piririta) Aguayo, Antonio R. Acosta, Lorenzo Palma, Ramón Ramírez, Herminio Careaga y César Gavilán. A ratos, el mismo Teófilo incursiona en el campo de la música para ponerles melodía a sus letras.

Su fuerte, sin embargo, son la creación y la interpretación poéticas. Esos atributos le significaron el primer premio de la categoría “Poesía en guaraní" del Festival del Takuare'ê, en 1997.

“Hacía rato que tenía la letra de Che retâme ajevývo. En el 2008, César Gavilán le puso un ritmo de polca-canción. Desde entonces, ese es el ropaje que lo trae y lo lleva a todas partes”, concluye el que también es director de la radio on line Ecos del Paraguay, que transmite desde Washington 24 horas de música paraguaya.

Teófilo Acosta, poeta bilingüe que vive en Washington, recupera en la palabra y la música lo vivido en el entorno de su Juan de Mena natal.

Memoria viva

Mario Rubén Álvarez

Poeta y periodista

alva@uhora.com.py

Che retâme ajevývo

Yvytúre tamondo

che purahéi tetâguáme

ha maymáva che renduhápe

toikuaami chendive

sapy'árônte ajumiva’ekue

viru mbovymi reka

ha péina ko ipahávo

ndaikatuvéi ajere.

Upépe ahejava’ekue

che sy, che ru tujami,

che ryvy ha che reindy

ku ahayhuetéva yvoty,

heta ro’yhohaguépe

oimémane hesarái

ha imborayhu oguepa

aiko rupi mombyry.

Techaga’u che jopi py'ýî

che képe ahechavove

ysyry satî porâme

aikórô añemboharái

ku che irûmi ypykuéndi

ñembojaru, akâhatâme

roikómi rojoayhupópe

akóinte chemoangata.

Ko vy’a'ÿ amboguévo

aikóva che amombe’u

iporâha che retâ

ha maymáva heko ypykue,

ijeroky, ipurahéi

hi'árpa sâ pu rorýpe

kuñakuéra kyre'ÿme

oipyaháva ñanduti.

Heta pyhare ndakéi

che pijoha tapiágui

ijojaha ndatopáigui

ñane retâ porâite

hi'ânte ymave guaréicha

arambi kuarahy'âme

ha pe ipyhare mimbípe

taipiro’y che rete.

Techaga’u che jopi py'ýî

che képe ahechavove

ysyry satî porâme

aikórô añemboharái

hi'ânte aime jevy

ñane retâ poyvi guýpe

tekojoja, pukavýpe

ñambotuicha Paraguay.

Letra: Teófilo Acosta Cantero

Música: César Gavilán