Cortés aseguró días atrás que una vez que asuma su nuevo cargo en diciembre ordenará que se cierre el paso fronterizo hasta que las carreteras no estén reparadas.
En un comunicado, la CNDC recordó al futuro intendente que la circulación de los camiones chilenos y argentinos está regulado por el “Convenio Argentino-Chileno de Transporte Terrestre en Tránsito, para vincular dos puntos de un mismo país utilizando el territorio del otro”, suscrito en 1974 y que por ello “no es posible impedir el tránsito de los transportistas hacia uno u otro país. Y la situación actual del tránsito es de completa normalidad”.
“Nuestra Confederación adhiere a la declaración hecha en las últimas horas por la Cancillería chilena, en orden a que no es posible cerrar el paso a camiones de nuestro país”, afirmó la CNDC en la nota, antes de advertir que el eventual cierre unilateral del paso “rompería con el Acuerdo ATIT suscrito por las naciones de la región, que asegura jurídicamente la libertad de tránsitos interfronterizos”.
Además, significaría la interrupción por carretera de las regiones chilenas de Magallanes y Aysén con el resto de los territorios en Chile, ya que para ello usan el tramo Cardenal Samoré-Villa La Angostura, y de los argentinos que lo hacen para reingresar a su país”, concluyó.
Quiebre. Cortés asumirá el cargo de intendente de Bariloche el próximo 10 de diciembre y, ya desde hace tiempo que viene denunciando que el paso de cientos de camiones de carga desde Chile hasta Argentina estaba causando el destrozo de las rutas de su región. “Tenemos que ponernos y decir acá no pasa nadie hasta que no arreglen la ruta. Uno tiene que tomar decisiones drásticas. Acá pasan los camiones chilenos y rompen. No pueden pasar más los camiones chilenos, se terminó. La gente destruye sus autos, estamos en esa situación desgraciada”, manifestó hace dos semanas tras ganar las elecciones en su ciudad, ubicada a unos 100 km de la frontera con Chile.
No obstante, el pasado miércoles bajó los decibeles de sus dichos al señalar que “no se trata de cortar el paso”, antes bien lo que quiso fue “llamar la atención de las autoridades argentinas para que arreglen la ruta”, manifestó a un programa de TV chilena
Recíproco. Desde hace casi medio siglo, todos los días centenares de camiones atraviesan la frontera entre Chile y Argentina a la altura de la cordillera, transportando exportaciones hasta sus puertos de la Patagonia. Esto fue posible a instancias del convenio firmado en 1974, mediante el cual los camiones chilenos están autorizados a transitar por Argentina a cambio de que los camiones argentinos puedan hacer lo propio para llegar a la provincia de Tierra del Fuego, conectada al continente solo por territorio chileno.