El asalto fue a las 16.15 aproximadamente, sobre las calles Alberdi y Manduvirá, cuando los tres malvivientes, a bordo de una camioneta Nissan Navara, interceptaron un taxi en el que estaba el comerciante argentino Héctor Raúl González, a quien despojaron de 43 mil dólares. El extranjero había cambiado su dinero en una casa de cambios sobre la calle Palma.
Una patrullera de la Comisaría 3ª empezó la persecución tras el pedido de auxilio de la víctima. La persecución, según el comisario Juan González, siguió por barrio Obrero; de allí continuó hacia Lambaré y terminó en Bruno Guggiari y Pirizal, ya en territorio de la ciudad vecina a Asunción.
Detalles. En la mencionada intercepción, el semáforo estaba en rojo. La Nissan Navara atropelló a una Nissan Terrano, guiada por Roberto Toledo, quien estaba en compañía de su hija.
Al dejarle al rodado a un costado dieron un tiro a una camioneta que estaba en frente de ellos y les impedía el paso, un Mercedes Benz, al mando de María Graciela Caballero, para que le abran paso. La mujer recibió un refilón en el brazo izquierdo.
Pero en ese instante retrocedieron, ya que una patrullera les venía de frente. Al ir para atrás, otros móviles policiales ya les cerraron el paso.
En eso, policías se bajaron de sus móviles y empezaron a disparar hacia la camioneta de los delincuentes, mientras también desde la camioneta les disparaban a los policías.
La balacera paró; Toledo había muerto dentro del rodado, Cabezón cayó al piso, desde la camioneta, malherido; Fabio quedó en el vehículo. Los delincuentes fueron auxiliados por paramédicos y llevados hasta el CEM, donde permanecen internados en estado grave, ya que sufrieron heridas en la cabeza y en el tórax.
Además, encontraron el dinero que le habían robado al comerciante argentino.
Operativo cancha. El jefe de policía de Asunción, comisario Reinaldo Ojeda, indicó que el acorralamiento a los delincuentes se dio gracias a que había un gran despliegue policial, debido a la cobertura del operativo del partido de Cerro Porteño.