En redes sociales, los caacupeños cuestionaron la priorización de la construcción de empedrados por encima de equipamientos del sistema sanitario local. La Junta Municipal aprobó hace unas semanas el uso de casi G. 8.000 millones para estas obras.
El concejal Ramón Salvioni propuso disminuir los recursos para empedrados y redireccionar la diferencia en mejorar la infraestructura de las Unidades de Salud Familiar (USF) para que los caacupeños tengan atención rápida ante la ocupación de las camas del hospital distrital.
‘‘Propuse disminuir los recursos que se iban a destinar a la construcción de empedrados, para poder invertir la diferencia en infraestructura para mejorar los puestos de Unidad de Salud Familiar (USF), por lo menos invertir un 60% en el empedrado, que también se justifica, y 40% en utilizarlo para mejorar los servicios de salud’’, indicó el concejal. Explicó que Caacupé no tiene un hospital distrital, tiene un centro asistencial departamental, que recibe a pacientes de otros municipios y los caacupeños no cuentan con un hospital como tal; por eso era importante redireccionar parte del presupuesto.
A fines del mes de marzo, el Ejecutivo municipal pidió a la Junta reprogramar más de G. 2.800 millones al área de la salud con algunas modificaciones.
Después, la Comuna realizó a través del consejo de salud local la entrega de insumos para el Hospital Regional de Caacupé y un aporte de G. 26.400.000 para compra de materiales.
El temor es que debido al impacto de la pandemia en la economía, los ciudadanos no paguen sus impuestos y la Municipalidad carezca de fondos.
Desde ÚH intentamos hablar sobre el tema con el intendente Diego Riveros, pero no respondió las reiteradas llamadas.