Cerrado el 10 de setiembre por decisión de Johnson, el parlamento –que no debía volver al trabajo hasta el 14 de octubre– reanudó sus labores después de que el martes la Corte Suprema anulase la medida tomada por el controvertido primer ministro.
Y lo hizo pidiendo explicaciones al ejecutivo. “¡Dimita, dimita!”, gritaron muchos diputados a Johnson cuando compareció a última hora de la tarde, tras regresar urgentemente desde Nueva York, donde participaba en la Asamblea General de la ONU.
Pero en su lugar, el jefe de Gobierno conservador los desafío a expulsarlo del poder.
El Partido Laborista y las formaciones menores “tienen hasta que la cámara termine la sesión para presentar una moción de censura y podemos tener esa votación mañana”, lanzó. “¿Tendrán el valor de actuar o se negarán a asumir responsabilidades y no harán nada más que titubear y demorar? ¿Por qué no lo harían? ¿De qué tienen miedo?”, fustigó. AFP