Dada la volatilidad reciente en el tipo de cambio, el BCP informó en un escueto comunicado que estará presente en el mercado cambiario con ventas diarias de USD 15 millones, como mínimo, a partir de la semana entrante.
El BCP menciona que dicha volatilidad es “consecuencia de la mayor incertidumbre en el ámbito internacional y por factores estacionales”.
Ayer, el dólar interbancario tuvo una caída en su cotización y cerró a G. 7.975, luego de que el jueves alcanzara G. 8.000, cifra sin precedentes en nuestro mercado, según los datos del BCP.
En cuanto al mercado minorista, el dólar cotizó G. 7.920 a la venta, con una leve disminución con relación al día anterior.
Desde el 1 al 18 de octubre, el BCP ya vendió dólares al mercado por valor de USD 73 millones. En tanto que en el año ya lleva vendidos USD 1.277 millones, un 53% superior a las ventas netas realizadas en todo el año 2023.
El mercado cambiario en Paraguay ha experimentado una apreciación sostenida del dólar a lo largo de este año, alcanzando un incremento del 10,34% hasta la fecha, de acuerdo con datos proporcionados por Gustavo Rivas, CEO de Atlas Inversiones.
La perspectiva de los especialistas es que la cotización del dólar puede seguir escalando en nuestro país, considerando el escenario en la actualidad.
Preocupación. El ministro de Economía y Finanzas, Carlos Fernández Valdovinos, durante su disertación en el foro “América Latina: Reequilibrar las políticas y seguir adelante con las reformas”, que se realiza en Washington DC, acompañado del presidente del BCP, Carlos Carvallo, destacó la política monetaria del país, resaltando que el Banco Central del Paraguay ya ha alcanzado sus objetivos de estabilidad monetaria.
Sin embargo, expresó preocupación por el fortalecimiento global del dólar, un factor que podría incidir en la economía local y en los costos de importación. No es la primera vez que el secretario de Estado se pronuncia al respecto.
Fernández Valdovinos enfatizó que se encuentra en marcha el ajuste fiscal, con un enfoque estratégico para evitar impactos negativos en el crecimiento económico, diferenciando entre los efectos de reducir gastos generales y los de la disminución de la inversión pública.