“Obviamente hay por detrás de estos movimientos en la parte de este profesionalismo de la anarquía un articulador. Usted ha visto declaraciones que corren por parte de Maduro que amenaza o presume de aires de huracán bolivariano que llegan a los distintos países de la región para afectar su institucionalidad”, afirmó y añadió que son ellos mismos los que dicen estar haciéndolo.
El canciller se refiere a unas palabras del presidente de Venezuela en las que afirma que “el plan va en perfecto desarrollo”, y alude a la unión de los movimientos sociales, progresistas, revolucionarios, nacional populares de toda América Latina, el Caribe y más allá del mundo, aunque luego se desliga de las protestas en otros países. “Ustedes saben que ahora me echan la culpa de todo a mí y a Venezuela. Ahora el pueblo de Chile se rebela y se levanta y también la derecha chilena dice que es culpa de Maduro”, valoró el mandatario venezolano. Faurie afirmó que las reivindicaciones de los ciudadanos de Ecuador y Chile –desatadas por aumentos en los precios de combustible y de la tarifa de metro respectivamente– son legítimas de cada una de las poblaciones, aunque lo que es extraño es la forma de reclamación con una extraordinaria violencia.
En este sentido afirmó que en las protestas, que ya se han resuelto en Ecuador y siguen en su apogeo en Chile, uno ve actuar a gente de una manera muy profesional de la anarquía que no es necesariamente el poblador o la persona o el miembro de la sociedad que está preocupado porque subió el precio del metro. “Así no se manifiestan los pueblos, se ve como un ejército anárquico que sale a combatir a las autoridades constituidas”, agregó Faurie, quien afirmó estar en contacto con su par chileno y con el embajador argentino en Chile. El ministro de Relaciones Exteriores evitó ser tan directo a la hora de señalar a Venezuela como fue también Miguel Ángel Pichetto, candidato a vicepresidente por el oficialista Juntos por el Cambio, que lidera el presidente Mauricio Macri, para los comicios del domingo.
Pichetto habló de un proceso de desestabilización en la región con injerencia venezolana-cubana y afirmó que la dictadura militar en Venezuela, en sociedad con Cuba, está avanzando en otros países de Latinoamérica.