El fuerte de la presentación estuvo en las coreografías realizadas por los 4 coristas que acompañaron a Pires. También jugaron un papel importante los músicos con sus intervenciones especiales con el saxo, el ukelele, entre otros. Durante varias canciones, el artista ejecutó su guitarra.
Los vestuarios se presentaron elegantes y coloridos, con mucho brillo, con casi cuatro cambios durante toda la presentación para el artista y el coro bailarín. Pires usó su tradicional sombrerito negro, además de otros. Eu menti encendió la algarabía de los presentes quienes coreaban “Olé, olé, Olé Alee, Alee”, a lo que el protagonista agradecía emocionado.
En la noche también se pudo escuchar Mal Acostumado, de Araketu; Tá Afim De Sambar, del grupo Os Morenos; Beleza Rara y Me Abraça, ambos de Banda Eva, y Carrinho de Mão. del grupo Terra Samba, entre otros éxitos.
La tecnología jugó un papel preponderante con los juegos de luces que se movían a la par de los contagiantes ritmos que se intercalaban entre los románticos y movidos. En medio del espectáculo, Alexandre obsequió al público una bandera de Brasil, luego autografió una bandera de Paraguay para ponérsela sobre los hombros, besarla y lanzarla al público.
Ambiente. Se destacaron la alegría y energía del artista, quien en todo momento demostró simpatía con su amplia sonrisa. Incluso le cantó cumpleaños feliz a una de las fanáticas presentes. La ocasión también fue propicia para agradecer a Rubén Rodríguez, quien según contó el brasileño, hizo sonar las canciones de Pires por primera vez en Paraguay. A cada tanto repetía “¡Qué linda es Asunción!”.
No faltó el forró, con Rindo À Toa y Xote Dos Milagres. El espectáculo se completó cuando lo mejor de la pagode entró en escena con canciones como Deixa A Vida Me Levar que se hizo conocida en la voz de Zeca Pagodinho; Samba de Arerê, del grupo Revelaão, y la inolvidable A Barata, de So Pra Contrariar. El público coreó las canciones, bailó y aplaudió al artista, quien para despedirse dijo: “¡Gracias, Asunción!”.
Alexandre Pires do Nascimento fue reconocido obteniendo prestigiosos premios a nivel latinoamericano como los Grammy latino y Premios Latin American Music de la revista Billboard. Realizó dúos con Gloria Estefan, Alejandro Sanz y Rosario Flores. También realizó homenajes a cantantes como su compatriota Roberto Carlos y a Julio Iglesias. Es uno de los mayores exponentes de música pagode. En 2010 fue el brasileño con más discos vendidos en América Latina.