Rolando Alarcón, presidente de la Federación Paraguaya de Fútbol de Salón (FPFS), se refirió en charla con Radio Canal 100 sobre los pormenores del lamentable deceso de uno de los ídolos del salonismo, Darío Herrera, quien falleció el lunes pasado.
“Él (Darío Herrera) tenía una enfermedad cardiaca de nacimiento, denominada hipertrofia cardiaca. Su familia, desde niño, se opuso a que desarrollara cualquier competencia deportiva. Sin embargo, su pasión era tanta que no supo obedecer”, confesó Alarcón.
Alarcón no ocultó su admiración hacia el jugador: ”Realmente era un joven prodigioso que tuvo nuestro deporte y fundamentalmente un goleador nato. Hacía goles de cualquier parte, no se le podía dar oportunidad. El que quería ganar tenía que tenerlo en su equipo”.
Abordó además sobre sus inicios y dijo: “Herrera fichó por primera vez a los 17 años en el club Recoleta de Coronel Oviedo. Desde ahí comenzó una larga labor dentro de nuestra disciplina deportiva. Recorrió todo el país para defender los colores donde era contratado. Jugó además en Colombia, donde fue llevado para animar los torneos profesionales”. Recordó además lo que vivió la familia de Herrera en sus últimos momentos de su vida: “Fue todo muy rápido, increíble. Hice el seguimiento de todo lo que le pasó a Darío. Me confesó su señora que cada minuto iba empeorando”.