Del 1 de enero al 30 de junio pasado se han dado 519 incidentes relacionados a violaciones de los derechos humanos en Nicaragua, incluidas 146 detenciones, detalló el Monitoreo Azul y Blanco, cuyos reportes son avalados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
De las 146 detenciones registradas, las autoridades liberaron a más de 90 que habían sido capturados en redadas masivas, de acuerdo con el informe.
Horas o días después de haber sido detenidos y acusados de delitos considerados “traición a la patria”, la mayoría fueron enviados a sus casas con medida cautelar, en la que deben firmar periódicamente en las delegaciones policiales o judiciales.
De los 519 incidentes relacionados a violaciones de los derechos humanos, 146 fueron detenciones, 114 hostigamientos, 102 incidentes de judicialización, 47 amenazas, 43 control social territorial, 33 represión migratoria, 25 cancelaciones de personalidades jurídicas/confiscaciones, y 9 agresiones, precisó el Monitoreo Azul y Blanco.
Los meses de abril y mayo repuntaron con 218 y 160 denuncias de violaciones a los derechos humanos, respectivamente, subrayó ese observatorio.
“La Semana Santa, la persecución a la Iglesia católica y el aniversario de las manifestaciones de abril de 2018, fueron los hechos que más han marcado la represión los últimos tres meses”, explicó el Monitoreo Azul y Blanco.
Managua, Chinandega, Masaya y la Región Autónoma del Caribe Sur fueron los departamentos (provincias) más afectados en los primeros seis meses del año, anotó el observatorio.
“TERROR” Y AUTOCENSURA. “La persecución política ha provocado un ambiente de terror y autocensura en la población”, advirtió.
Asimismo, el Monitoreo Azul y Blanco indicó que registraron 33 denuncias donde se violenta el derecho de entrada, salida y/o libre circulación de las personas.
Según el Mecanismo para el Reconocimiento de Personas Presas Políticas, hasta el 19 de junio pasado habían al menos 64 “presos políticos” en Nicaragua.
Entre los 64 opositores o críticos de Ortega que todavía guardan prisión se encuentra monseñor Rolando Álvarez Lagos, obispo de Matagalpa y administrador apostólico de la diócesis de Estelí, ambas en el norte de Nicaragua. El religiosos fue condenado a más de 26 años de prisión por “traición a la patria”.
Nicaragua atraviesa una crisis política y social desde abril de 2018, que se ha acentuado tras las controvertidas elecciones generales del 7 de noviembre de 2021, en las que Ortega fue reelegido para un quinto mandato, cuarto consecutivo y segundo junto con su esposa, Rosario Murillo, como vicepresidenta, con sus principales contendientes en prisión o en el exilio.