Por Robert Figueredo
CORONEL OVIEDO
La fuerte presión ejercida por los estudiantes de la Universidad Nacional de Caaguazú (Unca) condujo a la renuncia de la vicerrectora Giomar Viveros, elegida el pasado viernes y rechazada por el alumnado que la considera como el brazo derecho del ex rector Pablo Martínez. Con esto se descomprime el tenso ambiente que se vive desde hace 10 días en la Universidad Nacional de Caaguazú.
El Consejo reunido anoche llama a Asamblea Universitaria para las 16.00 de hoy para tratar dos temas: la renuncia de Viveros, que es un hecho será aceptada, y la votación de otro nuevo vicerrector. Adelantaron los asambleístas que arribaron a un acuerdo para que sea designado en el cargo el doctor Ulises Villasanti, ex decano de Odontología. El profesional goza del apoyo estudiantil y con su nombramiento se descongestionará la medida de fuerza en seis de las siete facultades de la Unca.
En tanto, en la Facultad de Ciencias de la Producción, las posturas cada vez están más encontradas. Por un lado, alumnos de 4 filiales de las 10 existentes exigen la renuncia del decano Jaime Torales Kennedy. Por otro, alumnos y docentes de la casa central apoyan al decano quien, a través de medios de comunicación, invitó a la contraparte a dialogar abiertamente para zanjar las diferencias. Sin embargo, los alumnos apostados frente al portón de ingreso a la facultad se niegan al diálogo y solo exigen la renuncia.
Ayer fue presentada denuncia en la Fiscalía de esta ciudad contra la administración de Torales Kennedy.
