El viento fuerte duró unos 5 minutos, en ese lapso de tiempo derribó la torre de la emisora comunitaria y la de otra estación, además destechó unas 50 casas.
Según pobladores, fue un viento huracanado con fuerte lluvia que redujo incluso la visibilidad en el momento que se desató la tormenta. Tras los pocos minutos que duró, volvió la calma con el cielo despejado y soleado.
La intendenta municipal Mirna Orrego dijo que hubo muchos daños, pero por suerte no hubo heridos. La Municipalidad, con todo su equipo de trabajo, realiza un monitoreo del perjuicio ocasionado tanto en comunidades indígenas como paraguayas, informó el periodista Alcides Manena.
También fue derribada la columna de la ANDE, en consecuencia, la zona se encuentra sin servicio de energía eléctrica. El fuerte viento propició que una embarcación turística que se encontraba estacionada en la orilla del río Paraguay se volcara.
Una escuela básica y una capilla de la zona también fueron afectadas.