En la reunión de la mesa directiva del Senado no se resolvió convocar a una extraordinaria para dar celeridad al tratamiento del veto presidencial al proyecto de ley que tiene como objetivo subsidiar la deuda campesina.
Los labriegos piden el análisis urgente de la objeción total del presidente de la República, Horacio Cartes. Sin embargo, esa situación no se estaría dando hasta el momento porque existen dudas en la cantidad de votos para rechazar la decisión del Ejecutivo.
Tanto el presidente de la Cámara Alta, Fernando Lugo, como los líderes de las bancadas, que estuvieron presentes en la reunión de la mesa directiva, tampoco incluyeron el tema en la sesión ordinaria de este jueves.
De la reunión solo participaron representantes del oficialismo, liberales llanistas y del Frente Guasu. Los líderes de la oposición y disidencia colorada se ausentaron.
El veto al subsidio debe ingresar primeramente al Senado –por ese motivo se solicitaba la extraordinaria- para luego girar a comisiones legislativas para que emitan los dictámenes correspondientes, requisitos para tratar el documento por el pleno de la cámara legislativa.
Los senadores necesitan 23 votos para ratificarse en su sanción inicial, que fue la aprobación del subsidio, y rechazar la objeción del jefe de Estado. En la primera oportunidad votaron a favor los legisladores de la disidencia colorada, Avanza País, PLRA y Frente Guasu.
La senadora Blanca Lila Mignarro (PLRA) ratificó que su postura será la de rechazar el veto y pidió al mandatario y a la ministra de Hacienda, Lea Giménez, sincerar los números con respecto al presupuesto necesario para cumplir con el subsidio.
DUDAS DE VOTOS. El senador por el Frente Guasu, Hugo Richer, dijo que no se convoca a una extraordinaria porque todavía quedan conversaciones por realizar entre los parlamentarios de las diferentes bancadas. Aunque no descartó que el veto presidencial sea tratado esta semana. “Si hay votos se puede tratar el jueves, esa es la realidad”, dijo a los medios de prensa.
“Los campesinos tienen que comprender esta situación. Si no hay votos suficientes, no creo que estén interesados en que se convoque la extra para mañana”, señaló.
Los campesinos están instalados hace 29 días en la plaza de Armas, ubicada frente a la sede legislativa, con la intención de lograr una respuesta a su problema económico, teniendo en cuenta la difícil situación en el campo a raíz de las inundaciones y las últimas heladas.
Con la presión de las marchas diarias por las principales calles del microcentro, lograron que el subsidio a sus deudas sea sancionado en el Congreso Nacional. Sin embargo, no tuvo el acompañamiento del Ejecutivo.