El matrimonio, que lleva más de cincuenta años juntos como pareja y también al frente de la marca, rememoró su trayectoria empresarial, que les ha llevado a abrir más de 500 tiendas en los 5 continentes.
“Él es la cabeza y yo el corazón” de Tous, dijo Rosa Oriol al recoger el premio junto a su marido. También se rodearon en Nueva York de sus cuatro hijas, quienes han recogido el testigo del negocio familiar.
La historia de la marca comenzó en 1920, en Manresa (Barcelona), con los padres de Salvador Tous, quien años después seguiría con el negocio familiar junto a su esposa.
La cena de gala, en un lujoso salón de actos en Park Avenue, contó con varios centenares de invitados, incluidas algunas caras conocidas, como la duquesa de Montoro, Eugenia Martínez de Irujo, diseñadora eventual de la marca.
Desde la Cámara de Comercio bitaleral se destacó la contribución de la pareja a la industria joyera de España y se ensalzó el valor de marca global de Tous, con una presencia creciente en Estados Unidos.
En un encuentro previo con periodistas, Salvador Tous explicó la “dificultad” de expansión que representa EE.UU. “porque son muchos mercados juntos, el de Florida no tiene nada que ver con el de California o Nueva York”.
“Esperamos ahora ya estar en EE.UU. para quedarnos”, señaló el cofundador de la firma, quien afirmó que la fórmula del éxito de la firma es “trabajo, trabajo y más trabajo”.
Hace solo unos meses abrieron dos nuevas tiendas en Nueva York, en el Soho y el World Trade Center, que se suman a la ya existente en Rockeffeller Center.
En Estados Unidos, con un total de 19 tiendas propias y hasta 60 puntos de venta, Tous aumentó su beneficio 10 % el año pasado.
En su discurso de agradecimiento, Rosa Oriol recordó que cuando se casó pudo haber elegido quedarse en casa para cuidar de sus hijas pero que “afortunadamente” decidió trabajar y “descubrir la pasión por las joyas”.
Oriol, quien fue quien dio con el famoso oso logotipo de la firma en 1985, ensalzó la importancia que se da en Tous a la conciliación familiar y explicó que en la central de Manresa (Barcelona) cuentan con una guardería para los hijos de los trabajadores.
Cada año, la Cámara de Comercio España-Estados Unidos reconoce la labor de un empresario español por su contribución a las relaciones empresariales entre ambos lados del Atlántico.
En 2015 el galardón recayó en Juan José Hidalgo, presidente de Globalia.
