El nuevo responsable máximo de la embajada checa en La Habana será Vladimír Eisenbruk, quien fue ya embajador en Costa Rica, México y Perú.
Hasta ahora, el país centroeuropeo ha estado representado por encargados de negocios, debido a las tensas relaciones entre La Habana y Praga.
Después de la caída del “Telón de Acero” en 1989, la República Checa (hasta 1993, Checoslovaquia) se convirtió en uno de los mayores críticos del Gobierno comunista cubano por la situación de los derechos humanos en ese país.
Según la emisora pública, una portavoz del Ministerio de Exteriores checo reconoció que ha mejorado “el diálogo muto” y que hay “nuevas dinámicas en las relaciones” bilaterales.