Adelina Gavilán fue con su familia al patio de comidas del Shopping del Sol y mientras su esposo se disponía a realizar un pedido en uno de los locales gastronómicos, la mujer le dio de mamar a su hijo pequeño ya que este empezó a inquietarse.
“Agarro la mantita que tenía, me cubro y le doy”, expresó Adelina. En ese momento señaló que un hombre vestido de traje oscuro se acerca a ella para “invitarla” a pasar al cambiador de bebés para amamantar ya que en ese lugar, le dijo, estaba prohibido.
“Y le digo ¿por qué? Yo no le estoy faltando al pudor, no le estoy faltando el respeto a nadie, estoy tapada le dije”, señaló.
El guardia nuevamente le repite que son reglas del shopping. “Yo le dije ahí que no me iba a ir porque no me parecía apropiado dar de mamar cerca del baño y me respondió ‘bueno señora son las reglas, si usted no quiere le invito a que abandone el shopping’”, relató Adelina que esa fue la respuesta del hombre.
Óscar Villalba, esposo de Adelina, señaló que en aquella oportunidad sintieron mucha impotencia por cómo fueron tratados y que ahora que sale a la luz la información sobre dar de mamar en espacios públicos creyeron importante contar su experiencia para dejar sentado de que sí hubo un precedente de prohibición.
“En ese momento fue algo indignante y doloroso para nosotros. Ahora después de mucho tiempo es como que una espina sale, era algo que teníamos atragantado que ahora lo podemos contar”, señaló.
El caso sucedió hace 4 años atrás pero la familia afirma que la ocasión actual es propicia para dar a conocer su desagradable experiencia y de este modo dar un testimonio sobre lo que habían pasado hace tiempo.
La versión del shopping
. Gabriel Giussani, gerente general del Shopping del Sol, expresó que el local cuenta con un espacio destinado para dar de mamar pero que es decisión de las madres hacerlo allí o donde se sientan más cómodas.
“Le dedicamos a las madres el espacio, el tiempo y la tranquilidad para que puedan amamantar. Es un lugar optativo que está a disposición del cliente si lo quiere usar, eso no implica una prohibición de darles de mamar donde se les antoje”, sostuvo.
Por su parte, Adriana Appleyard, gerente comercial del Shopping Mariscal, indicó que también cuentan con una sala de lactancia creada bajo la pauta de la Unicef pero que tampoco es una obligación que las madres deban acudir solo a ese espacio para amamantar a sus hijos.
“Bajo ningún aspecto (está prohibido), las personas que tengan la necesidad de mamar, aquí en el shopping pueden hacerlo libremente, también tenemos montada una salita de lactancia que a veces es más cómodo pero es a criterio de cada una”, manifestó.