Explicó que el BID es quien propone, maneja y monitorea el crédito y tan pronto haya un problema con el mismo, el IPS reclama la fianza, que en este caso es del 100%. El BID repaga el crédito y sus intereses a IPS y posteriormente se hace cargo de perseguir el cobro a la empresa.
López puntualizó que al IPS le faltan proyectos que generen renta y a la fecha el 70% de la cartera de fondos está en bancos, los cuales ya están llegando a sus límites de depósito, por lo que el acuerdo con el BID lleva a la diversificación de la cartera.
Ratificó que el IPS está autorizado a conceder créditos siempre que sean seguros, con garantía y rentables. “Esta operación financiera tiene la mayor seguridad que una inversión pueda tener; siendo legal y financieramente conveniente para IPS”, enfatizó.
Desde Tigo se informó que el crédito servirá para financiar la expansión de gastos de capital con el fin de ampliar la actual red de 3G y establecer una de 4G LTE en Asunción, Ciudad del Este, San Lorenzo y las zonas circundantes. Además, buscará mejorar el acceso en las zonas rurales, conectar a más hogares a la red y potenciar los servicios de la empresa. Tigo también dará acceso a internet de gran capacidad a instituciones públicas de salud y de educación, a la Policía Nacional y a zonas y poblaciones desatendidas a través de telecentros fijos y móviles.
BUEN NEGOCIO. Eduardo Almeida, representante del BID en Paraguay, explicó que esta operación forma parte de un programa que empezó hace casi dos años con el IPS –firmado el 4 de diciembre de 2015– y se basa en un proyecto de garantía. El BID identifica una empresa de su brazo privado como cliente que necesita moneda local, propone al IPS como vehículo para financiar y el BID garantiza la operación.
En cuanto a las condiciones de financiamiento, Almeida dijo que la tasa y los plazos se proponen y se negocian con el IPS, de acuerdo con el retorno y el riesgo que se tome. Agregó que esta sería la tercera operación con el IPS.
