No obstante, de acuerdo con el último informe divulgado en la víspera, indica que se debe considerar que el lago sigue presentando características de eutrofización (elevado contenido de nutrientes que sirven de alimento para ciertos microorganismos).
Atendiendo al pronóstico de periodos con sequías moderadas para los próximos meses, se espera que las condiciones del lago vayan tornándose cada vez más propicias a los florecimientos de algas, especialmente con el aumento de la temperatura.
Por otro lado, si bien los humedales de Pirayú y Yukyry actúan como filtros que depuran naturalmente el lago –permitiendo que las aguas sean de mejor calidad– sostienen que la construcción de viviendas, la canalización y el drenaje han impactado en los humedales y han disminuido su capacidad de depuración.
Recomendaciones. Según la Digesa, se requiere insistir en aspectos como: protección y recuperación de humedales, ya que actúan como depuradores, tratamiento de los líquidos cloacales e industriales, control y manejo adecuado de residuos sólidos urbanos e industriales, uso correcto de la tierra, control de erosión y cargas difusas de contaminación tanto agrícola como pecuaria, reforestación, monitoreo periódico, entre otros.
