El fiscal Víctor Maldonado, que investiga el caso, manifestó en Monumental AM que este viernes el CFA de Zeballos Cué le acercó una nota donde se identifica a las personas que estuvieron el día que ocurrió el abuso y las funciones de cada una.
Las identificadas fueron Sandra Solís, Sonia Valdez y Bárbara Peña, así como unos menores de edad que ayudaban a las mujeres. Indicó que tuvo que intimar a los encargados del CFA, porque primero entregaron una lista en donde los menores estaban con iniciales.
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Explicó que no pueden alegar la condición de la minoría de edad para una investigación fiscal. Adelantó que citará a todas las personas para la semana que viene.
También le llamó la atención que el CFA no haya hecho mucho por esclarecer el caso. Le resultó “inconcebible” que una institución que trabaja la conciencia no haya tocado el tema.
La víctima confirmó en la cámara Gesell que sufrió unos manoseos por parte de una “tía”. La madre de la niña realiza tareas de limpieza en dicho local cristiano los sábados, donde además lleva a sus hijos para un estudio bíblico, desarrollado por dos encargadas. Al terminar el trabajo y volver a la casa –de acuerdo con lo que señaló la denunciante ante la Fiscalía– la madre notó que su hija “estaba con los ojos llorosos y una actitud diferente”.