EFE
Los bomberos también elevaron a 7 el número de personas desaparecidas por el derrumbe del edificio, entre las cuales se encuentran los gemelos Welder y Wender, de 9 años, por lo que la víctima encontrada puede corresponder a uno de los niños.
El cuerpo fue localizado en el área central de los escombros y al parecer corresponde a la séptima planta del edificio que se derrumbó tras ser consumido por las llamas el pasado martes, de acuerdo con los equipos de rescate.
Gracias a las indicaciones que hizo en la víspera una perra del equipo de rescate, las autoridades encontraron el cuerpo a las 06.30 hora local (09.30 GTM) tras horas de excavaciones manuales.
“Ahora a las 6:30, durante una excavación manual, localizamos el cuerpo de una víctima de pequeño porte, que podría ser el de un niño”, declaró el portavoz de los Bomberos, capitán Palumbo, quien agregó que el cuerpo tenía señales de carbonización.
La primera víctima fatal, encontrada el pasado viernes, fue identificada como Ricardo Oliveira, un hombre de 39 años que estaba siendo rescatado cuando el edificio se desplomó.
Según el Cuerpo de Bomberos, los trabajos serán intensificados durante el día en la zona central de los escombros, ya que hay “muchos indicios” de que más víctimas podrían estar bajo los destrozos en el área.
No obstante, la probabilidad de encontrar personas con vida “disminuye a cada hora”, explicó el Teniente Guilherme Derrite.
“Cuanto más avanza el tiempo, más difícil será encontrar personas con vida. El trabajo ahora es minucioso, quirúrgico, en la zona en la que encontramos esas partes de víctimas para preservarlas”, afirmó.
Además de las seis personas en las que se concentran las búsquedas -los dos niños gemelos, su madre Selma Almeida y la pareja Eva Barbosa Silveira, de 42 años, y Walmir Souza Santos, de 47- los Bomberos incluyeron hoy a Francisco Dantas, de 56 años, en la lista oficial de desaparecidos.
El edificio Wilton Paes de Almeida, de 24 plantas y que durante años fue sede de la Policía Federal en São Paulo, estaba ocupado de forma irregular por más de 300 personas de escasos recursos y se incendió debido a un cortocircuito en un enchufe, según explicó el secretario de Seguridad Pública, Mágino Alves.
El fuego se extendió a dos edificios colindantes y acabó provocando el desplome de la estructura, que a su vez derribó parte de una iglesia vecina.
Tras la tragedia, la mayoría de las familias han sido trasladadas a albergues municipales y recibirán una ayuda económica de 1.200 reales (unos 338 dólares) el primer mes y 400 reales (unos 113 dólares) los doce siguientes.
Algunas familias, sin embargo, han optado por acampar a pocos metros del antiguo edificio para exigir una vivienda, ya que se niegan a ir a los albergues ofrecidos por la Alcaldía.