12 may. 2025

Escándalos sexuales e impuestos, los dardos del recio debate Clinton-Trump

AFP, EFE y REUTERS

Ataques.  Ambos candidatos se lanzaron duras acusaciones durante el segundo debate con miras a las elecciones presidenciales del 8 de noviembre.

Ataques. Ambos candidatos se lanzaron duras acusaciones durante el segundo debate con miras a las elecciones presidenciales del 8 de noviembre.

SAN LUIS - EEUU

Hillary Clinton y Donald Trump cruzaron ayer acusaciones en un tenso debate presidencial, empañado por un nuevo escándalo para el republicano por declaraciones abusivas sobre mujeres y acusaciones contra Bill Clinton.

En una discusión transmitida en directo por los grandes canales estadounidenses, el magnate y la ex secretaria de Estado se vieron nuevamente cara a cara en la universidad Washington de San Luis. Con la tensión al máximo, los 2 rivales evitaron darse la mano al ingresar al recinto del debate. Trump repitió la afirmación de que sus alardes –grabados en un video de 2005 difundido el viernes– sobre haber agarrado a mujeres por sus genitales y besarlas a la fuerza fueron una conversación de vestuario. Aunque pidió disculpas, el magnate dijo que aquello eran solo palabras, mientras que denunció que “Bill Clinton fue abusivo con mujeres”. La demócrata contraatacó: “Este es Donald Trump”, añadiendo que el candidato conservador no está capacitado para ser presidente.

Estaría en prisión. Trump dijo que si él estuviera al frente del país Hillary Clinton estaría en la cárcel por el escándalo del uso de su correo electrónico privado cuando era secretaria de Estado. Trump atacó con dureza a Clinton por ese escándalo y amenazó con nombrar a un fiscal especial para investigar a la ex secretaria de Estado si llega a la Casa Blanca. “Hubo muchas mentiras, mucho engaño, nunca hubo nada como eso”, enfatizó el magnate al respecto.

“Mirad la propaganda en las páginas web terroristas; lo que Donald Trump dice lo utilizan para captar terroristas”, aseguró Clinton. La ex primera dama aseguró que los comentarios de Trump sobre los musulmanes son, además, imprudentes y peligrosos. Clinton, quien fue secretaria de Estado, lamentó que los países árabes sean reticentes a luchar junto a EEUU en la guerra contra el Estado Islámico (EI) cuando escuchan los comentarios del magnate neoyorquino Trump. “Muchos de estos países ahora escuchan a Trump y dicen, ¿para qué vamos a colaborar con ellos (con EEUU)? Eso es un regalo para el EI”, agregó.