EFE
“Estos fieles y heroicos discípulos de Jesús fueron asesinados en odio a la fe en un tiempo de persecución religiosa”, recordó el papa desde la ventana del Palacio Apostólico del Vaticano.
“Que su martirio, aceptado por amor de Dios y por fidelidad a su vocación, suscite en la Iglesia el deseo de testimoniar con fortaleza el Evangelio de la caridad”, añadió, momentos después del rezo del Regina Coeli, que sustituye al Ángelus en tiempo pascual.
Los misioneros beatificados, que formaban parte del Seminario del Sagrat Cor en Canet de Mar (Barcelona), eran Antonio Arribas Hortigüela, Abundio Martín Rodríguez, José Vergara Echevarría, José-Oriol Isern Massó, Gumersino Gómez Rodríguez, Jesús Moreno Ruíz y José del Amo y del Amo.
Los siete fueron beatificados por el prefecto de la Congregación para la causa de los santos, el cardenal Angelo Amato, en una ceremonia a la que asistieron el nuncio apostólico en España y Andorra, Renzi Fratini, el arzobispo de Barcelona, Juan José Omella y Omella, y el arzobispo de Tarragona, Jaume Pujol y Balcells, entre otros.
Los misioneros del Sagrat Cor son una congregación religiosa fundada el año 1854 por el sacerdote francés Julio Chevalier que cuenta actualmente con más de 1.500 miembros y está presente en 50 países de todo el mundo.