En una olla de 5 metros de diámetro, con dos horas y media de cocción, el guiso contó con 150 kilos de carne, panceta y chorizo, 600 kilos de lentejas secas, 350 de patatas, 115 litros de pulpa de tomate, 65 kilos de cebolla, 60 litros de aceite, 13 kilos de sal y tres de pimentón y orégano español, que se prevé que rinda unas 12.000 raciones.
El proyecto, promovido por Daniel Rama, director de la distribuidora de alimentos Emigrante, fue la actividad central de la jornada de hoy en la 111 Exposición Internacional de Ganadería y Muestra Internacional Agroindustrial y Comercial (Expo Prado), de gran tradición en el país suramericano.
“Al igual que el año pasado, que batimos el Récord Guinness al guiso más grande del mundo, este año lo que intentamos hacer es rebatir nuestro propio récord: Nos comunicamos con Guinness y ellos nos pasaron la cifra de superar los 2.365 kilos y, por suerte, lo hemos logrado”, remarcó Rama en declaraciones a Efe.
El empresario, “muy contento” con repetir la idea, explicó que el guiso es “algo muy uruguayo”, un plato que “todo el público lo aprecia y lo sabe degustar”.
“Creemos que es algo muy característico de Uruguay. Queríamos hacer algo para tener responsabilidad social empresarial y, además, la ONU (Naciones Unidas) decretó este año, el año internacional de la legumbre. Entonces creo que iba todo dado de la mano para poder desarrollar este guiso”, explicó sobre reiterar la propuesta.
Los organizadores estiman que de la cazuela se obtengan unas 12.000 raciones, que se venderán a 50 pesos (alrededor de 1,7 dólares) y los beneficios se destinarán a la Fundación Teletón de Uruguay, dedicada sobre todo a la habilitación y rehabilitación de niños y adolescentes con alteraciones neuromúsculoesqueléticas.
La escribana pública uruguaya encargada de constatar el proceso de elaboración del plato, Analía Cánepa, certificó el peso de 3.345 kilos del guiso, siguiendo todo el procedimiento de preparación del guiso para que “se cumplan con lo reglamentario y de esta forma acreditar que es el guiso más grande del mundo”.
Por su parte, la cocinera encargada de la elaboración de la cazuela tanto de este año como del anterior, Alicia Magariños, señaló a Efe que se sentía “muy feliz” por “batir” su propio récord”.
“Todo se cumplió como pensábamos, teniendo la experiencia del año anterior, que nos sirvió de mucho”, agregó Magariños.
Centenares de curiosos que paseaban por el recinto se acercaron para observar y degustar la preparación de este famoso guiso que, si se vuelve a validar el certificado de superación del peso marcado por Guinness, ratificarán el título de guiso más grande del mundo.
