Durante la gira, entre los días 17 y 23, Xi se reunirá con los presidentes de los tres países y con ellos firmará sendas tandas de acuerdos de cooperación, entre ellos de índole económica, que refuercen los importantes vínculos comerciales y de inversión entre ambas partes.
“La relación bilateral está ganando impulso”, afirmó un viceministro chino de Exteriores, Wang Chao, quien avanzó que la cooperación integral entre la región y Pekín “seguirá profundizándose”.
Esta será la tercera visita del presidente Xi a Latinoamérica desde que llegó al poder (tras las de 2013 y 2014), y se centra en países de la costa del Pacífico con los que el gigante asiático mantiene una importante relación económica y política.
“Latinoamérica y el Caribe es un lugar muy importante para que China desarrolle su cooperación económica y comercial”, señaló por su parte otro viceministro de Exteriores, Li Baodong, quien destacó especialmente el potencial para que el gigante asiático promueva las inversiones en “capacidad productiva”, término técnico para referirse a industrias.
La relación económica de China con la región ha estado tradicionalmente dominada por la exportación latinoamericana de materias primas, como minerales o petróleo, aunque últimamente se ha desarrollado mucho la exportación de alimentos.
Por ello, Latinoamérica insiste desde hace años en lograr inversiones en el tejido industrial e infraestructuras, algo que conviene a China