“Más allá de las reivindicaciones, la forma actual de protesta es inadecuada y causa un grave perjuicio a todas las personas vinculadas a la Universidad”, expresa parte del comunicado dirigido al rector, Narciso Velázquez y a miembros del Consejo de Gobierno de la universidad.
El escrito señala además que, pese a los intentos de diálogo para buscar una salida al conflicto que ya lleva un mes, no presentaron avances.
Los decanos manifestaron su total apoyo y disposición a las iniciativas y acciones que puedan tomar el rector y las autoridades de la universidad con el objetivo de encontrar una solución.
No obstante instaron al diálogo hasta que se logre levantar la toma. “Que se continúe con el diálogo hasta lograr que las puertas de la sede central del Rectorado sean abiertas para todos”, indica el comunicado.
Si bien José Antonio Galeano se acogió a la jubilación, fue en su calidad de docente y eso no debería haberse extendido para sacarlo del alto cargo de la casa de estudios. Los universitarios sostienen que existe un móvil político para poner fin a su gestión.
Las tres reivindicaciones del estudiantado son: la reincorporación del decano José Antonio Galeano y de la profesora Elisa Bordón al despacho para que terminen su mandato; la destitución de Narciso Velázquez, rector de la UCA, y una reforma estatutaria que garantice la participación de todos los estamentos para la revisión y formulación de los nuevos estatutos de la UCA.