CAACUPÉ
El monseñor Claudio Giménez lamentó ayer sobre la situación de extrema violencia en el país con los delitos, crímenes y hechos que enlutan a familias paraguayas.
En ese sentido, condenó el terrible caso de la niña Iluminada Ruiz Díaz Aranda, de 8 años, que fue encontrada muerta en el cauce del río Paraná, en la zona de Itapúa, luego de un día de desaparecer de su vivienda, donde residía con sus tíos.
Los dichos del religioso fueron realizados ayer durante su homilía en el día de Cristo Rey, coincidente con la clausura del jubileo extraordinario de la Misericordia, en la misa central en Caacupé.
El monseñor apuntó durante su prédica que el asesinato es “producto de una crueldad que no tiene nombre”, y dijo que ni los animales tratan así a sus crías.
Conmoción. El crimen de la niña Iluminada conmocionó a todo el país. La menor fue llevada desde su propia cama. Por el caso, se encuentra detenido e imputado Agustín Anzoátegui.
