Vacas sueltas sin ningún tipo de control y cuidado se han convertido en una constante en el casco urbano de la ciudad de Coronel Oviedo, Departamento de Caaguazú. A cualquier hora, por transitadas avenidas y en plazas o parques, se puede observar este panorama que pone en riesgos a conductores y peatones.
Los animales pasean libremente entre los autos y las personas, arriesgándolos.
Además, el efecto dañino que estos animales producen en los espacios públicos ha sido motivo de quejas de vecinos, que exigen mano dura de las autoridades municipales con los propietarios de estos ejemplares, mayoritariamente lecheras de producción.
Tanto el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones como la Municipalidad ovetense cuentan con normativas que regulan la tenencia de animales en la ciudad o en los costados de las rutas del país; pero los afectados no ven un verdadero compromiso de parte de los propietarios.
Desde hace tiempo que no se observa a los agentes de la Patrulla Caminera realizar el arreo de ganado vacuno que transitan por las rutas asfaltadas de la región. Tampoco se divisa a efectivos de la Policía Municipal de Tránsito de Coronel Oviedo con esas actividades en la zona urbana de la ciudad.
ESPACIO FÍSICO. La escasez de espacio físico para hacer pastar a las lecheras es la problemática que obliga a propietarios de los ejemplares a dejarlos libre para que recorran las calles y rutas.
De hecho, realizar el trabajo de producción de leche es una actividad que ya no se puede desarrollar en ciudades, debido a múltiples circunstancias, entre ellas las normativas básicas de convivencia en la ciudad.
Varios reclamos ya se han presentado en la Municipalidad ovetense, pero sin ningún tipo de respuesta según se confirmó. Para muchos, la inacción del intendente Eladio González es el reflejo de su nulo interés hacia los intereses ciudadanos.