Este año la ciudadanía –que es la principal financiadora de este gasto– deberá nuevamente cargar la pesada mochila, ante la inacción del Gobierno en miras a mejorar del gasto público.
Según la Ley de Presupuesto 2020 promulgada el pasado jueves, solo en la Administración Central se gastarán este año G. 12,5 billones (USD 1.953 millones en el cambio de ayer) en salario, viáticos y gastos en representación.
Esto equivale a un promedio diario de G. 34.251 millones (USD 5,3 millones) que se deberán recaudar a través del cobro de impuestos y otros ingresos para poder cubrir los gastos en los conceptos mencionados.
De acuerdo con el desglose, el Poder Legislativo gastará este año G. 290.983 millones en gasto de remuneración al personal, el Poder Ejecutivo G. 10,4 billones y el Poder Judicial G. 1,6 billones.
En tanto, la Contraloría tiene presupuestados G. 94.347 millones para el mismo fin; la Defensoría del Pueblo G. 6.817 millones y el Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura G. 2.172 millones. (Ver infografía).
A estos –sueldo, dietas y viáticos– se deben sumar los demás beneficios pagados como: subsidio familiar, bonificaciones y gratificaciones, y gratificaciones por servicios especiales; que abultan aún más el monto citado.
DESPILFARRO. En el último mes del año nuevamente saltó a la luz la manera de derroche del dinero público, mediante el pago de aguinaldo extra disfrazado de “subsidio familiar”.
El despilfarro inició con Petropar y continuó con el Ministerio de Hacienda, que pagó a todos sus funcionarios G. 4 millones en concepto de “subsidio familiar”, en pleno año preelectoral y en un complicado 2019 recesivo.
Esto generó fuertes críticas por parte de la ciudadanía, que manifestó su rechazo mediante las redes sociales.
Para tratar de poner calma a la situación, Hacienda afirmó que suspenderá los pagos extras este año.
Sin embargo, en el penúltimo día del 2019 decidió autorizar de manera silenciosa a las demás 20 entidades el pago extra a sus funcionarios, que costó a los contribuyentes USD 11 millones.