La mera intención de cobrar por transferencia es un despropósito, porque la situación actual da cuenta de que el sistema bancario es uno de los ámbitos que aseguran más altos rendimientos y siguió ganando en pandemia, según la economista Gladys Benegas.
La medida indigna y va a contramano con la formalización, ya que generará más inequidad, según refirió.
También se preguntó por qué se excluirá al sector público de ese eventual pago de comisiones, ya que esa perspectiva no habla de igualdad ante la ley.
MERO LUCRO. Al tiempo de desconocer si en otros países se aplica lo que en Paraguay es una intención, dijo que solo el Banco Central del Paraguay hizo la inversión para el sistema: “Es simplemente pretender lucrar de forma desproporcionada, no tiene ningún sentido e irrita cómo se percibe esa angurria”, enfatizó.
También recomendó a la banca matriz mirar cuánto de gastos administrativos están cobrando los bancos y financieras por los servicios que prestan, no solamente las comisiones ni los intereses, ya que el cálculo del rendimiento rayaría el 50%, según mencionó. La eficiencia, a su criterio, debería venir por el lado del banco; pero con esta situación los consumidores podrían pagar la ineficiencia.
INCIERTO. La coyuntura actual es, según dijo, de incertidumbre, con tendencia al deterioro; entonces, por qué plantear siquiera este tipo de medidas, según se preguntó la economista.
“En vez de contribuir a disminuir la inflación, con esto se estarían generando más gastos para un sector que hoy se está bancarizando.
Si se concretara el pago por el uso del Sipap, dijo que eso haría simplemente que el lavado de activos sea más fácil, ya que todos volverían a la transferencia en efectivo, a contramano con la idea de formalización de la economía, bancarizando y con trazabilidad.
Por su parte, la economista Verónica Serafini Geoghegan expresó en su cuenta de Twitter: “Esta discusión es muy interesante. No están de acuerdo con los impuestos, pero sí con el Sipap como bien público”.
También la legisladora Desirée Masi Jara posteó contundente: “El #Sipap se hizo con inversión PÚBLICA. El sector de bancos y financieras, de mayor rentabilidad en la región, pretende hacer creer que el funcionamiento 24/7 significa aumento de costo y no pueden asumir? Van a quebrar? Dejen de joder. O vamos a prohibir abuso por ley”.
INCREDULIDAD. El también congresista Édgar Acosta Alcaraz indicó, sobre el bancario, que es el sector que más dinero ganó, incluso en pandemia, “ahora quiere cobrar comisión por transferencias, para tener tecnología y más seguridad, nadie les cree. Es el mismo sector que estaba en contra de los giros (que es muy útil para toda la población), ‘supuestamente’ por seguridad”.
Desde los gremios que se indignaron con la medida que salió a luz, Diego García, presidente de la Cámara Paraguaya de Fintech, alegó que esta intención de los bancos matará la cultura del dinero digital.
Indicó que con esta medida se obligará a las personas a pagar G. 4.000 por una transacción, lo que representa para la mayoría que gana sueldo mínimo, privarle de un pasaje de ómnibus. Dijo que lo que se logrará es que las personas vuelvan al dinero en efectivo, a que saquen todo su dinero del cajero, que es lo contrario a promover la bancarización.
De “miserables” tacharon, por su parte, las Cámaras de Comercio de las Ciudades de Fronteras de Ciudad del Este, Pedro Juan Caballero, Salto del Guairá, Encarnación, Pilar, Alberdi, Nanawa y Ayolas, conjuntamente con otras organizaciones empresariales del comercio fronterizo, a la intención del BCP y la banca privada de cobrar un porcentaje por cada transferencia bancaria realizada.
Recordemos que la Comisión de Industria, Comercio y Turismo convocó a los representantes de la Asobán, Abafi y BCP para explicar los argumentos del sector.