Un aspecto fundamental en este quiebre de rutina –afirma– es mantener los hábitos en los horarios indicados para evitar desequilibrios.
“No ir al trabajo, a la escuela o la facultad modifica el ritmo. Estamos viendo que muchas personas se desincronizan; duermen por un largo periodo en el día y se activan a la noche, y luego hay problemas de sueño, haciendo que esta situación empeore”, describió.
No dormir las suficientes horas, en el periodo establecido, puede desencadenar varios problemas. Los más frecuentes, según Taboada, son: la ansiedad, la irritabilidad, mala alimentación por saltar los horarios de las principales comidas.
En niños. La población infantil es uno de los grupos que más preocupan, atendiendo a que dejaron de tener clases presenciales y la socialización con los compañeritos es estrictamente virtual, destacó el profesional.
“Como esto es nuevo estamos convocando a reuniones con distintos especialistas de infancia, adolescencia y salud mental para ver qué sugerencia dar a padres y también al Ministerio de Educación sobre lineamientos útiles de cómo seguir de aquí en adelante”.
La cantidad de tiempo que los chicos pasan frente a la pantalla es otro aspecto a tener en cuenta. Esto genera un punto de partida para la menor actividad física, aumento de exposición a luz artificial, inversión de los ritmos de sueño y hasta alteración de hábitos alimentarios, indicó el profesional.
Entre los planteamientos, analizan paseos terapéuticos para niños, como se implementa en otros países. “Los chicos tienen la necesidad de volver a salir, estar en espacios abiertos. También ver la posibilidad de lugares recreativos donde, en cantidad reducida, puedan volver a socializarse de una forma diferente”.
En adultos. Consultas por casos de incertidumbre, miedo y ansiedad son las más frecuentes que se registran en las líneas telefónicas habilitadas para contención emocional, según el director de Salud Mental.
Todo tipo de encierro prolongado de por sí es un factor precipitante. Aumenta el riesgo de desarrollo de trastornos mentales, refirió al respecto.
Indicó que hay muchos casos de personas que volvieron a caer en los vicios del alcohol, el tabaco. Hay abuso en el consumo de sustancias. Afirmó que existe un aumento en los cuadros depresivos.
Para buscar apoyo emocional, varios profesionales de la Sociedad Paraguaya de Psiquiatría ponen a disposición sus números de teléfono para contacto virtual. Ante cualquier duda pueden comunicarse al (0986) 416-997 o visitar la página del Facebook donde se encuentran más informaciones sobre horarios de atención.
La cartera sanitaria insta a evitar la sobreinformación, acudir a fuentes oficiales o confiables, evitar contenidos alarmistas.
También recomienda ayudar a los niños a encontrar maneras positivas de expresar sus sentimientos, como el temor y la tristeza. “Los pequeños se sienten aliviados si pueden expresar y comunicar sus sentimientos en un entorno seguro y de apoyo”.