La notificación dada el viernes último en horas de la mañana, por la División de Fiscalización, dependiente de la Dirección de Recaudaciones de la Municipalidad de Ciudad del Este, establecía un plazo de 48 horas para dar cumplimiento a la Ordenanza 02/97, que regula las ocupaciones de espacios públicos. Ese plazo venció ayer, considerando que se cuentan días hábiles.
Sin embargo, la edil municipal, del Partido Colorado y ex aliada de Miguel Prieto y cuyo voto permitió la aprobación del pedido de intervención de la administración de la intendenta Sandra McLeod de Zacarías en octubre, decidió allanarse al pedido de la Comuna antes de que venciera el plazo.
Contrató una máquina pesada y removió la estructura, con lo cual se evitó repetir la misma escena que se vivió la semana pasada en la residencia de la ex intendenta Sandra McLeod y su esposo, el senador Javier Zacarías Irún.
Diferencia. Obviamente había una gran diferencia de tamaño entre ambas estructuras. La garita de seguridad de la familia Zacarías era de 4 m2 y ocupaba toda la vereda, obligando al peatón a salir a la calle para seguir caminado. La habitación del personal de seguridad tenía todas las comodidades básicas, como cama, microonda, heladera, sillas, sofá, bebedero, entre otros enseres.
La caseta de seguridad de la familia Aguinagalde era más pequeña y más modesta. No ocupaba toda la vereda y tenía 1,20 x 2,5 metros de largo aproximadamente, pero, según la Comuna, no tenía autorización.
Ayer el intendente Miguel Prieto Vallejos dijo que no ordenó la notificación a la concejala municipal y aseguró que fue una tarea de fiscalización y reconoció que la estructura no obstaculizaba el paso de los peatones, como sí ocurría con la caseta de los Zacarías; empero, tampoco se opuso y respeta el trabajo de los funcionarios, siempre y cuando se ajuste a las ordenanzas vigentes.
“Los funcionarios hicieron su trabajo y antes de que nosotros sepamos lo que estaba pasando, Lilian decidió derrumbar su caseta y creo que eso fue ya consecuencia de lo que ocurrió con la caseta de Javier Zacarías Irún”, refirió Prieto, al señalar que una parte de la caseta estaba dentro de la propiedad de la concejala y otra en la vereda.
Continúan notificaciones
En otro momento, el intendente Miguel Prieto confirmó que un conocido supermercado, ubicado en el kilómetro 4 entre la avenida Monseñor Rodríguez y la supercarretera Mariscal López, fue notificado, primero por tener una caseta de seguridad en la vereda y segundo por utilizar una calle como estacionamiento privado.
“Allí hay una calle que por años venía siendo usurpada. Vamos a recuperarla para la circulación de vehículos. Ese es un importante retorno. Esa es una calle, no un estacionamiento. Estamos trabajando para recuperar los espacios públicos y empezamos con los Zacarías”, refirió.
La ocupación ilegal de espacios públicos, más concretamente de las veredas, es un problema que afecta a toda la ciudad. No hay barrio que se salve de la ocupación ilegal. Son utilizadas como espacios de exhibición y la gente tiene que salir a la calle para poder caminar.