De acuerdo al informe policial, el local fue visitado por delincuentes que ingresaron con armas largas y utilizando una violencia extrema.
Tomaron de rehén a Bobadilla, que fue usado como escudo ante la llegada de efectivos policiales, que fueron alertados por otros empleados de la distribuidora.
Los efectivos se enfrentaron con los asaltantes, que pudieron huir en medio del tiroteo, llevándose a uno de los trabajadores.
Horas después, el cuerpo de Jaime Bobadilla fue encontrado en un descampado, no muy lejos de donde sucedió el asalto.
El hombre presentaba un golpe en la cabeza, realizado con un objeto contundente, y también tenía rastros de picaduras de abejas. Se maneja la información de que sus agresores colocaron en su cabeza una caja que contenía un enjambre de abejas.
Los intervinientes indicaron que alrededor de cinco personas participaron del asalto. Testigos los vieron bajar de un automóvil Chevrolet Prisma, color negro e ingresar al local comercial.
Según explicaron los investigadores, los asaltantes huyeron a bordo del automóvil, disparando hacia los intervinientes. Unos metros más adelante abandonaron el vehículo y continuaron la huida a pie. Se internaron en un esteral que queda en las inmediaciones del comercio, siendo seguidos por los uniformados.
El comisario Javier Flores, jefe del Departamento de Investigación de Hechos Punibles de Alto Paraná, reveló que fue detenido uno de los sospechosos. Se trata de Rafael Ayala González, que fue alcanzado por los policías cuando se encontraba en plena huida.
Al parecer, los asaltantes, no lograron el objetivo al no tener tiempo de llevarse el dinero que habían ido a buscar.
El cuerpo del infortunado empleado fue llevado hasta el Centro de Salud local, donde fue inspeccionado por el médico forense.
El caso está en manos del fiscal Miguel Alvarenga, que acompaña las incursiones realizadas en la zona.