El cantante y bajista Sting, el guitarrista Andy Summers y el baterista Stewart Copeland desempolvaron viejos clásicos como “Message in a Bottle”, “Spirits in the Material World” y “Don’t Stand So Close to Me” durante los primeros compases de un concierto con entradas agotadas en el GM Place de Vancouver.
“Me gustaría presentar la banda. Andy, este es Stewart”, dijo humorísticamente Sting al público, entre el que había seguidores famosos como la actriz Penélope Cruz, Pearl Jam o el roquero Eddie Vedder.
La gira echó a andar extraoficialmente la noche antes cuando la banda tocó un ensayo general para cerca de 4.000 miembros de su club de fans. Police ha estado ensayando durante cuatro meses, después de que Sting decidiera que era el momento justo para una reunión y llamó a sus antiguos compañeros.
La banda se rompió en medio de un conflicto de egos en 1984, después de su último concierto de su gira mundial Synchronicity en Australia, pero se reunió para una serie de conciertos benéficos de Amnistía Internacional en 1986.
Sting consiguió tras la disolución incluso más fama y fortuna como un artista ecléctico, mientras que Copeland se centró en componer para el cine y la televisión, y Summers exploró sus raíces jazz con varios proyectos.
La gira mundial que ahora los ha reunido culminará a principios del próximo año, tras dos giras por Estados Unidos, una vuelta por Europa, y varias fechas en Latinoamérica, Japón, Australia y Nueva Zelanda.
Después de terminar la gira, todavía no está claro qué camino tomará la banda. Summers dijo hace poco a la revista Guitar Player que “lo obvio” sería grabar un nuevo álbum y volver a salir de gira.
Pero Copeland declaró a Reuters la semana pasada que su deseo en este momento no era ese, y que sólo esperaba pasarlo bien este año y después decidir. REUTERS